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El naranjo
Algunos recomiendan el consumo de naranjas para mineralizar el cuerpo, eliminar toxinas y depurar la sangre. Produce energía y ayuda en la concentración haciéndola recomendable tanto para la dieta de los jóvenes como de los adultos. Son diuréticas y su alto contenido de fibras ayuda a la digestión y al tránsito intestinal y produce sensación de saciedad. Es rica en potasio, calcio, magnesio, fósforo.
La naranja dulce (Citrus sinensis) es una especie subtropical del género Citrus. Son árboles pequeños, con frutos y flores poco resistentes a las heladas.
Se adapta a una gran variedad de suelos y condiciones. Posee una raíz pivotante y muchas raíces secundarias, que pueden alcanzar 1,5 m de profundidad. Prefiere un ph entre 5,5 a 7,0. Necesita una importante cantidad de luz solar para el proceso de floración y fructificación. La temperatura es un factor que afecta este periodo.
Los requerimientos de agua son elevados para la producción, por lo que en épocas de bajas precipitaciones y vientos excesivos es necesario complementar con riego.
Es necesario pensar bien donde ubicarlo ya que los vientos fuertes le causan deshidratación, la rotura de las ramas, caídas de las flores y frutos.
Siembra
Puede realizarse a través de semillas sembradas en semillero o bien comprando los plantines, los cuales debemos cuidar que estén libres de enfermedades y plagas. Si son injertadas es importante comprobar que la unión entre el injerto y el patrón sea buena.
El tamaño del hoyo varía de acuerdo con el tipo de suelo, en suelos arcillosos 60 x 60 x 60 cm o más, en suelos franco - arenosos 40 x 40 x 40 cm. Antes de la siembra, la tierra superficial se mezcla con materia orgánica y se la coloca al fondo.
El distanciamiento entre las plantas varía de acuerdo con la variedad elegida, entre 6 y 7 m más o menos.
Labores culturales
El abonado se realiza antes del trasplante, al primer año de la siembra y a los cinco o seis años (en plena fase productiva).
El desmalezamiento durante el proceso de crecimiento es muy importante y puede hacerse de forma manual o controlando el crecimiento de las malezas con cultivo de leguminosas de cobertura que además aportaran nitrógeno al suelo.
Se realizan podas de formación (para distribuir las ramas y el follaje), de limpieza (eliminar ramas enfermas o rotas) y de rejuvenecimiento (es una poda severa del árbol para provocar un crecimiento nuevo y vigoroso).
En la cosecha se debe tener cuidado de no maltratar ni la planta ni los frutos para su mejor conservación.
Fuentes
Lerena Gabarret, A. (1980) Enciclopedia de la Huerta. (Séptima Edición). Buenos Aires: Editorial Mundo Técnico S.R.L.
Recuperado de
Infojardín. Poda del Naranjo, Mandarino, Limonero, Pomelo http://articulos.infojardin.com/Frutales/poda-naranjo-mandarino-limonero.htm