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Según las formas de las rocas en el camino de la cascada, se formaban grandes pozas de agua clara y cristalina, donde las truchas vivían en un hábitat perfecto. Crecía el musgo, los helechos y todo tipo de plantas de un profundo color verde. Después, todos contaron sus aventuras al subir a la montaña y decidieron pedir en el colegio que la próxima excursión fuera más lejos, donde había una cordillera, que es una serie de montañas unidas entre sí y enlazadas una al lado de otras, distinta de la montaña a la que habían subido que estaba rodeado del valle por todas partes. La cordillera se compone de muchas montañas juntas y los chicos querían conocer de cerca la experiencia de caminar de un pico a otro entre las montañas.
En el colegio, dos días más tarde, Alberto y Esteban recibieron el premio que les habían prometido por ser los primeros en llegar a la cima de la montaña. Era un libro muy grande, lleno de bellísimas fotografías a todo color de montañas famosas en todo el mundo, en el que se contaba sus características y quiénes o cómo habían subido a ellas, escalándolas. Eran montañas rodeadas de grandes llanuras, que son como valles, terreno liso, con pueblos, sembrados y bosques. En el libro había también fotos de inmensas cordilleras y se podía ver las altísimas montañas, una al lado de otra, formando una cadena que, a veces, constituyen fronteras que dividen dos países. Alberto y Esteban agradecieron el premio y se citaron aquella tarde para leerlo juntos en casa.
—¿Por dónde empezamos? —preguntó Esteban.
—Por la montaña más alta del mundo —dijo Alberto.
Miraron en el índice del libro, abrieron en la página indicada y comenzaron a leer.
Explicaba que la montaña más alta del mundo es el Everest, que forma parte de la cordillera del Himalaya y es su pico más alto: tiene 8848 m. A sus pies se extiende una inmensa región en un valle o llanura.
Se llama Everest porque ese es el nombre de un inglés quien fue el primero en medirle en metros en el siglo pasado, pero el nombre anterior de esta montaña era Chomologna, que quiere decir «diosa madre del país», y así la llaman los sherpas.
— ¿La llamarán así porque es la montaña más grande?
—Puede ser.
— ¿Qué es un sherpa?
Dice que un sherpa es un habitante del pueblo montañés que vive a un lado de esa montaña. Los sherpas son grandes escaladores y acompañan muchas veces, y también ayudan indicando buenos caminos a las expediciones que se organizan allí para escalar el monte Everest.
Sobre el libro
Autor: Paulina Odiaga
Título: Excursión a la montaña
Editorial: Europa-ediexport