Como tema final del contenido sobre vivero escolar, en esta entrega abordaremos la temática que se relaciona al endurecimiento; es decir, fortalecer a las plantitas para depositarlas finalmente en el lugar definitivo.
En el vivero, las plantas reciben todos los cuidados para que crezcan bien, entre ellos, sombra, riegos, sustrato fértil y protección contra los vientos, entre otros. Cuando se las saca del vivero y van a plantación, sufren un cambio muy fuerte, porque de golpe dejan de tener todos estos cuidados.
El endurecimiento, también llamado «rusticado», es la etapa final de producción del vivero y consiste en ir retirando de a poco todos los cuidados que se dan en el vivero, para que la planta se endurezca y soporte mejor el cambio de la plantación.
Durante el endurecimiento, las plantas se sacan de la sombra, se les van reduciendo los riegos, se deja de aplicar abonos, y se las coloca en lugares menos protegidos que en el vivero. Esta tarea debe realizarse de 30 a 45 días antes de la plantación en el lugar definitivo.
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Durante el endurecimiento, la planta reduce el crecimiento en altura y refuerza el crecimiento de raíces y grosor del tallo, quedando en mejores condiciones para soportar el trasplante definitivo.