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La primera parada se realizó en la escuela básica n.º 47 Prof. Pedro Aguilera, en la que la directora Lucía Aguilera dio la grata bienvenida a los presentes. Posteriormente, se entonó el Himno Nacional y se realizó la invocación a la bandera.
Los alumnos demostraron sus talentos en las presentaciones artísticas: los chicos del 1.er grado declamaron Mi amigo el libro, los del 2.º presentaron la dramatización Valor de la Biblioteca Viajera y las alumnas del 6.º deleitaron con una danza kyre’ỹ. Los niños del 4.º grado recitaron Kuku lele, y el coro de niños de la institución cantó el himno de la escuela y el tema Un solo canto, de Lizza Bogado.
La siguiente entrega se realizó en la localidad Potrero Angelito, en la escuela básica n.º 393 y colegio nacional Feliciana Almada Acosta. En un evento ameno y en conexión con la naturaleza se realizó el acto en el patio de la institución, el cual estuvo dirigido por los alumnos.
María Jazmín Ayala, del 2.º año, leyó Ka’i ha aguara y deleitó notas melódicas con su violín, los alumnos del 4.º y 5.º cantaron Burrerita, y Fiorella Vega interpretó El libro. Por último, el profesor Nelson Ramírez, con su guitarra, invitó a todos los presentes a cantar con orgullo y entusiasmo Mi Paraguay.
A través de la solicitud de la coordinadora del CRA, Maida Zalazar de Fleitas, la caja amarilla y los suplementos escolares enriquecerán los Centros de Recursos de Aprendizaje (CRA) de la institución.
La última parada se realizó en Cabañas, en la escuela básica n.º 278 Dr. Raúl Peña. Luego de la cordial bienvenida de la directora, la Lic. María Elena Núñez de Colmán, se entonó con fervor y patriotismo el Himno Nacional.
Los alumnos Marian Figueredo Ortega y William Ortega dieron unas palabras de agradecimiento, y Romina Brítez Giménez declamó una poesía.
Luego, se realizó la entrega de las llaves al supervisor pedagógico Lic. Marcos Resquín Moreno y a los directores de las escuelas asociadas al proyecto. Con la gestión de la coordinadora departamental Graciela Agüero Meza y la técnica Gloria Estigarribia, las Bibliotecas Viajeras llegaron a las instituciones del departamento de Cordillera.