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El contexto histórico
A pesar de los múltiples tratados e intentos por evitar el enfrentamiento de la Guerra del Chaco, diversos hechos desencadenaron el conflicto que se inició en el territorio chaqueño. Declarada la guerra, la consigna era recuperar el territorio ocupado y defender a la patria. Las fuerzas militares paraguayas tuvieron un objetivo claro: retomar el Fortín Boquerón que había sido ocupado por el Ejército boliviano. Este era superado en número y en posición por el Ejército paraguayo, que había sitiado —rodeado— Boquerón. Sin embargo, las duras condiciones climáticas, a las que se sumaron la falta de agua, alimento y municiones afectaron a ambos bandos, y aquella tarea de recuperación de Boquerón duró 21 días. El Ejército boliviano tenía órdenes de su gobierno de resistir a cualquier costo, sin embargo, el teniente coronel Marzana ante lo inevitable, y casi sin recursos, decide rendirse ante las tropas paraguayas lideradas por el entonces teniente coronel José Félix Estigarribia.
Acciones para recordar
A pesar de las irreparables pérdidas humanas de ambos bandos, quedan en la memoria, sobre todo en la de sus protagonistas, acciones que demuestran verdaderos valores humanos en medio de la desgracia de la guerra. Entre ellas podemos destacar el comportamiento tanto de los soldados como de los altos mandos.
Una vez ofrecida la rendición por parte del Ejército boliviano, existen relatos que ante el agotamiento de los extenuantes 21 días de asedio, soldados paraguayos y bolivianos se estrechaban en un abrazo, y los paraguayos ofrecían agua y otros productos a los vencidos: «(…) Se desprendían del precioso líquido al ver que los bolivianos estaban en peores condiciones. Otros, ya con la caramañola vacía, ofertaban en cambio galletas, o carne conservada, o cigarrillos, confirmando así, una vez más, nuestro tradicional espíritu de hidalguía y hospitalidad, aumentando en este caso por la compasión hacia el enemigo, camarada al fin, en desgracia».
Así también es conocido el encuentro entre los tenientes coroneles de ambos bandos, Marzana y Estigarribia, en el que estrecharon las manos y en el que Estigarribia prometió respetar la vida de los prisioneros de guerra luego de la rendición. Del mismo modo, son dignas de mencionar las palabras del entonces presidente del Paraguay, el Dr. Eusebio Ayala, por demás significativas: «Los oficiales y soldados bolivianos que se batieron en Boquerón y son nuestros prisioneros… se comportaron con tal bravura y coraje, que merecen todo nuestro respeto».
Actividad
Amplía tu conocimiento
Investiga acerca de las causas que originaron la Guerra del Chaco.
Fuentes
VERÓN, L. (2010). La guerra del Chaco. Asunción: El Lector
BEJANO, R.C. (1965). Boquerón, la batalla decisiva. Serie Guerra del Chaco n.° 4. Asunción: Casa editorial Toledo.