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Capacidad: Reconoce la importancia de la excreción para el equilibrio interno del cuerpo.
El aparato urinario lo forman los riñones y las vías urinarias.
Los riñones
Son dos órganos en forma de poroto situados en la zona lumbar, debajo de la cintura, y cumplen la misión de filtrar la sangre para obtener la orina, que contiene las sustancias de desecho.
En el riñón se distinguen las siguientes partes:
- La corteza, de aspecto granulado, zona exterior.
- La médula, de aspecto estriado, zona central.
- La pelvis renal es la zona donde se recoge la orina.
El riñón se comunica con las vías urinarias para llevar los desechos al exterior.
Las vías urinarias
- Están formadas por los uréteres, que comunican los riñones con la vejiga.
- La vejiga es la bolsa muscular donde se acumula la orina antes de ser expulsada al exterior.
- La uretra es el conducto que comunica la vejiga con el exterior. En la mujer tiene unos seis centímetros y en el varón, unos quince centímetros.
La orina
La orina es el principal medio por el que nuestro cuerpo expulsa sus desechos al exterior. Está compuesta por agua (95 %), sustancias inorgánicas (2 %) y sustancias orgánicas (3 %).
La cantidad de orina expulsada cada día es variable y depende del estado de salud, actividad, época del año, otros.
Enfermedades del aparato excretor
Existe un gran número de enfermedades que afectan a este aparato. Las más frecuentes están provocadas por agentes infecciosos que originan infecciones urinarias, cistitis y otras. Pero lo más destacado del aparato excretor es la insuficiencia renal, en la que uno o los dos riñones pierden parte o la totalidad de su capacidad de filtración. Si ese hecho ocurre con un riñón, el otro puede asumir la función de ambos, pero, si se dañan los dos, los productos de desecho se acumulan en el organismo y constituyen un grave problema. El avance de la ciencia y la tecnología ha permitido encontrar solución a este problema; la más efectiva es el trasplante de riñón, que consiste en colocar a la persona enferma un órgano donado por una persona fallecida (donante) o sus familiares. Cuando no se encuentran donantes, el mecanismo que permite purificar la sangre se llama diálisis y consiste en la filtración o limpieza de la sangre mediante un aparato al que podríamos llamar riñón artificial. Estas personas acuden periódicamente a los hospitales donde se les conecta a una máquina que extrae su sangre contaminada y, tras filtrarla, la devuelve purificada.
Fuente
MARQUINA, F y SUÁREZ, B. Ciencias de la Naturaleza. Biología y Geología. Gobierno de Navarra. Departamento de Educación y Cultura
ACTIVIDADES
Explica
1. La importancia de la eliminación de los residuos tóxicos por los riñones.
2. Escribe en un párrafo de cincuenta palabras sobre la donación de órganos y su importancia para salvar vidas.