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La natación es un deporte ideal, una actividad útil y recreativa para las personas, muy beneficiosa para la salud tanto a nivel físico como psíquico, es uno de los ejercicios físicos más completos para trabajar la mente y el cuerpo, mantiene en forma, fortalece los músculos y la memoria, por lo que es recomendable su práctica a cualquier edad.
Y es que usar todos los músculos del cuerpo para impulsarse por el agua combinados en un solo deporte es perfecto. Los beneficios de la natación están más que demostrados, y muchas personas con dolores de espalda o problemas físicos disfrutan de este deporte como cualquier otro deportista.
Beneficios de la natación como ejercicio físico
Como rutina física la natación tiene una serie de ventajas para el cuerpo, entre las cuales se encuentran: rebajar los niveles de tensión arterial, mejorar el funcionamiento de la actividad osteomuscular, mejorar la capacidad respiratoria, ayudar a fortalecer los tejidos del cuerpo, mejorar la actividad del corazón, aumentar la circulación sanguínea, prevenir y aliviar enfermedades como el asma, y lesiones musculares nerviosas, relajar la musculatura, mejorar el sistema cardiovascular, el sistema respiratorio, la mente y la calidad de vida de las personas.
La natación es una actividad sin impactos, rebotes ni movimientos bruscos, que aporta seguridad y la baja complejidad permite su práctica a personas que por distintos motivos no pueden practicar algún otro deporte. La natación actúa contra el dolor en las lesiones, siempre y cuando la técnica utilizada sea la correcta.
La flexibilidad en natación
Es una capacidad importante para trabajar en este deporte. Todos los nadadores deberían trabajar la flexibilidad antes de entrar en el agua para preparar a los músculos para el trabajo acuático y después del entrenamiento para evitar la rigidez.
De este modo se pueden obtener mejoras considerables en cuanto a la técnica de nado al mejorar significativamente la amplitud de movimientos. Además, debemos saber que cuando el nadador aumenta de edad pierde flexibilidad, incluso con un entrenamiento que sea regular en el agua. Por ello, es primordial trabajar la flexibilidad regularmente.
En general, pueden ser suficientes los ejercicios de movilidad, estiramiento de articulaciones de la columna, hombro, cadera y tobillos. Sin embargo, sobre todo para los nadadores de competición se aconseja diseñar un programa especial para que pueda mejorar la capacidad de flexibilidad y, por tanto, obtener mejoras en la técnica de nado y, en definitiva, mejoras en el rendimiento final.
Actividad
Elabora una lista de las ventajas de la práctica de la natación.
Fuentes: MEC. Paraguay. 2014. Programa de estudios de EEB, SÁNCHEZ, P. 2014 disponible en: https://bit.ly/3jG0JnE, https://bit.ly/3lvy1Xe.