Cargando...
Sin industrias, especialidad ganadera, agrícola o artesanal, Altos es, sobre todo, proveedora de mano de obra a las ciudades aledañas. Pese a ello, recientemente empezó a sentir con mayor fuerza que antes las repercusiones de la actividad turística de San Bernardino (ciudad distante a pocos kilómetros), que se extienden hacia ella.
El hotel La Grappa, Punta Prima (propiedad de inmigrantes europeos) y Granja Don Papalo conforman las ofertas turísticas de calidad asentadas en esta ciudad que carece de atractivos mayores que su vista hacia el lago Ypacaraí y su abundante naturaleza. Aún así, estos negocios cautivan a quienes buscan descansar en un ambiente agradable y próximo a la capital del país, con habitaciones confortables, restós, piscinas y opciones de entretenimiento general.
Don Papalo tiene apenas dos años, pero ya está siendo ampliado en respuesta a la alta demanda registrada, tanto por parte de quienes van solo a pasar el día como de aquellos que pasan la noche. Su capacidad de alojamiento es de 100 personas en habitaciones, cuyos costos para pernoctar son de G. 370.000 y G. 500.000 por pareja.
Alberto Ojeda, el intendente de Altos, cuenta que pese a la ausencia de una cadena de supermercados en la comuna, son muchos los propietarios de residencias de veraneo en San Bernardino que llegan al municipio para hacer las compras, debido a las ventajas que presentan los precios.
Laguna. La firma Raíces Real Estate detectó el potencial de Altos para el desarrollo inmobiliario hace unos años, cuando puso en marcha los condominios Punta Lago y Punta San Bernardino. No obstante, la más fuerte de sus apuestas fue la instalación de uno de sus proyectos más importantes: el Aqua Village.
Se trata de un condominio cerrado, de la franquicia Crystal Lagoons, con una laguna artificial de tres hectáreas. Las tareas para dotarla de agua comenzarán este mes y la cota alcanzará su máximo nivel en febrero de 2016. Entorno a este espejo cristalino se erigirán cinco edificios de seis niveles cada uno; el primero será entregado en diciembre próximo.
Asimismo, cuenta con 380 lotes para viviendas unifamiliares, contemplando la disposición de un área comercial que incluye un hotel y un edificio, entre otros negocios, señala Ernesto Figueredo, presidente de Raíces Real Estate. De 180 terrenos a la venta, en la primera etapa, ya se comercializaron 170, destaca el ejecutivo.
El italiano Piaggio Mora migró su negocio hotelero de Venezuela, de donde salió por la situación política, para instalar su hotel Punta Prima en Altos, donde opera hace nueve años. Con seis habitaciones, piscina y restó para 130 comensales, abre todo el año.
Vivienda. Las inmobiliarias presentes apuntan a comercializar terrenos para la primera (Inmobiliaria del Este) y segunda vivienda. Si bien el planteo de Aqua Village se orientaba hacia casas de veraneo, a los desarrolladores les sorprende el porcentaje de clientes que vivirá allí. “De 15 casas en construcción, el 20 % será primera vivienda. Con la mejora de accesos, y los parques logísticos en Itauguá y Capiatá será más conveniente vivir en Altos”, dice el titular de Raíces Real Estate.
300 personas trabajan desde hace tres años de manera directa en diferentes áreas edilicias del condominio Aqua Village.
USD 70.000 es el costo base de lotes del emprendimiento inmobiliario; casas a partir de USD 195.000 y departamentos desde USD 185.000.