Cargando...
Enrique Biedermann, un joven visionario de 22 años que trabajaba en radio Stentor como locutor, leyendo los anuncios publicitarios se dio cuenta de que eran muy básicos, entonces comenzó a redactarlos con creatividad. A la gente le gustaron y vio que en eso podía haber una veta de negocio. Así nació la idea de abrir su propia agencia de publicidad, lo que sucedió en octubre de 1954. El primer local de la agencia funcionó en un garaje de la radio.
“Biedermann Publicidad creció gracias a que mi abuelo, y luego sus hijos, siempre manejaron muy bien las estrategias del negocio. Al ser el emprendimiento de un joven soñador, los pasos iniciales fueron difíciles, y al mismo tiempo desafiantes; pero también sus primeros años coincidieron con el extraordinario crecimiento que experimentó el Paraguay”, destaca Enrique Biedermann Smith, actual CEO de Biedermann.
La época, entre los años 50 y 60, representó un tiempo de varias modificaciones sociales a nivel regional, porque muchas marcas internacionales fueron ingresando al mercado local y la agencia trabajó con varias de ellas desde sus orígenes.
En un mundo que cambia en forma vertiginosa, para alcanzar y mantener el éxito, es imperativo renovarse casi a diario. Fue esta claridad la que permitió a la empresa mantener un constante crecimiento, desde su nacimiento hasta la actualidad.
En sus inicios, el fundador de la publicitaria era jefe y empleado al mismo tiempo. Él era la agencia en sí, pues realizaba trabajos de corrector, creador, redactor de anuncios y diagramador. Poco a poco, y con la creciente demanda, la cantidad de colaboradores fue creciendo. Actualmente, trabajan 80 personas en la firma, además de otras 40 o 50 a través de las otras empresas del grupo.
Este es un negocio que atravesó una sucesión familiar exitosa porque Enrique Biedermann y sus hijos Hugo, Carlos Jorge y Walter tuvieron la sabiduría de tomar decisiones difíciles en su momento, como lo fue la división de la empresa, retirarse o dedicarse a otra cosa. “Mi abuelo tiene mucho mérito porque fue abriendo otras empresas, lo cual facilitó este proceso. Mi papá (Hugo) se quedó en la agencia de publicidad y mis tíos Carlos Jorge y Walter, en otras empresas. Cuando fue preciso, actuaron con la madurez necesaria para sentarse a negociar y supieron conciliar los intereses. Gracias a que se hicieron bien las cosas en su momento y no estamos todos en la misma empresa, hoy somos una familia muy unida”, reconoce el CEO de Biedermann Publicidad.
A su parecer, las empresas familiares paraguayas en general están en un proceso de profesionalización. Muchas empezaron como microempresas, pero van comprendiendo que si no profesionalizan las estructuras, el crecimiento será limitado. “El país está en una etapa de crecimiento, cada vez somos más atractivos para los inversores extranjeros. Las firmas locales están entendiendo esta situación y, cada vez más, están encaminadas a rediseñar sus modelos de negocios para ser competitivas y mantenerse en el tiempo”, añade.
En cuanto al rubro, Biedermann Smith resalta que las agencias hoy son asesoras de inversión para sus clientes, porque los anunciantes quieren contar con la seguridad de que su inversión generará resultados. Este hecho mueve a la compañía a estar en la búsqueda constante de ideas innovadoras, que son alimentadas por el conocimiento de la cultura popular. Su foco apunta al negocio de las ideas y la integración digital de todas las áreas del mismo, porque la competencia se da a nivel regional y global. “Ya tenemos varios casos de exportación de servicios creativos y de producción de piezas para otros países, la ruta está trazada, tenemos que seguir avanzando”, comenta el empresario.
Destaque internacional
El negocio publicitario en el Paraguay vive un momento histórico. La participación de agencias paraguayas en los más importantes festivales del mundo, como Cannes o Clio Awards, con resultados altamente exitosos, deja ver que la industria se encuentra con un grado de madurez suficiente para empezar a mirar al mundo. Recientemente, Biedermann Publicidad ganó el Bronce en la categoría de Relaciones Públicas de los Clio Awards.
silvana.bogarin@abc.com.py