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Cuestionado sobre el punto, el consejero Ing. Carlos Arrechea lo justificó diciendo que son gastos que ya estaban presupuestados en el plan de terminación de Yacyretá y que llevarlos a otro lado sería malversación de fondos. Puedo hasta estar de acuerdo, pero recibí una tarjeta de invitación de primer mundo para el acto inaugural, por supuesto que no asistí, también he visto en ABC color una solicitada de publicidad de página entera el día 6 de febrero, Pág. 9, con tirada nacional, lo que según me informaron tendría un costo aproximado de 20.000.000 de guaraníes, las obras inauguradas son: sambódromo, playa, etc., etc., a un costo de casi US$ 5.000.000.
Al mismo tiempo, acá en Ayolas, la Entidad pone dificultades de todo tipo para firmar un convenio con el hogar de ancianos, desde enero del 2013, por un valor de 25.000.000 de guaraníes mensuales, para el sostenimiento y alimentación de alrededor de 20 abuelitos/as, con la excusa de la “falta de recursos”.
Debo mencionar también que cada tanto, los pobladores del barrio San Josemí tienen que levantarse a medianoche y salir con el colchón a cuestas, abandonando sus hogares por las inundaciones ocasionadas por Yacyretá.
Entonces digo: ¡qué inteligentes! el o los ingenieros que incluyeron el sambódromo en el plan de terminación de Yacyretá y se olvidaron de la defensa costera de Ayolas. Por otro lado, el pueblo sale a señalizar la ruta con pinceles y con colaboraciones particulares entre Isla Timbó y Ayolas, obligación incumplida por Yacyretá, que a menudo ocasiona pérdidas de vidas humanas.
Espero que la próxima obra del Plan de Terminación de Yacyretá no sea una réplica del estadio Maracaná en plena Encarnación.
De seguro que el presidente Cartes o por lo menos algunos allegados le harán llegar mi humilde opinión si es que se publica. Claro, pues no poseo los recursos como para pagar un espacio; pero me gustaría decirle que el acto de inauguración de las obras en Encarnación, como mínimo, tuvo un costo de 200.000.000 de guaraníes.
Consecuentemente, pregunto al Sr. Presidente: ¿Se habrá enterado en estos días que una topadora atropelló y mató a una nena de 10 años que estaba buscando plásticos para reciclar en Cateura? ¿Que su mamá había vendido el cabello de la misma para darles de comer ese día?
Esperaba, Sr. Presidente. que en vez de brindar por las obras a un costo de alrededor de 200.000.000 de guaraníes, el director Schmalko le dijera: Sr. Presidente, no realizaremos ningún acto, acá están 50, 100 o 200 millones de guaraníes y le pido que los lleve personalmente, como aporte, a la familia de la niña fallecida, por lo menos para un sepelio digno.
Señor Presidente, ESTE NUEVO RUMBO ES UNA PESADILLA, NO AQUEL QUE SOÑAMOS. Si no cambiamos de rumbo, estamos en el mismo carnaval de siempre.
Con todo respeto.
(*) Secretario general del Sinatray-Yacyretá. Ex secretario general del Sticcap-Itaipú.