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Abogado Guillermo Trovato Fleitas
Trovatoguille@hotmail.com
Rodríguez de Francia, Carlos Antonio López y el Mariscal Francisco Solano López se encargaron de potenciar el nombre del Paraguay en el concierto de naciones de ese entonces.
Tanto crecimiento provocaba la envidia codiciosa de los vecinos, quienes uniéndose declararon la Guerra de Exterminio contra el Paraguay.
A pesar de que aniquilaron a casi toda su población, hoy a más de 100 años siguen reteniendo nuestro añorado Cañón Cristiano y los Archivos Históricos del Paraguay; retención esta que demuestra el desprecio a una nación a la que casi acabaron.
Hoy, a 200 años de aquel arrojo de valentía de los Próceres de Mayo; si bien nos liberamos del yugo español, no podemos afirmar que el Paraguay es totalmente independiente, dado que a escasas horas de conmemorar el Bicentenario, nuestro país dependía de la decisión del Congreso brasileño en cuanto al aumento de la compensación por la energía paraguaya cedida en forma obligatoria al Brasil.
El nuevo espejito
Ese aumento de compensación, resultado de una ingeniería impune de la interpretación del Tratado de Itaipú por parte del Brasil, constituye el nuevo espejito para seguir exprimiendo y acallando al Paraguay, tal cual los españoles engatusaban a los indios paraguayos a cambio de sus riquezas de entonces.
De ninguna manera podemos festejar que se ha conquistado la soberanía energética, cuando que es bastante claro que el Acta de Foz de Yguazú suscripta por ambos países en junio de 1966, documento hoy plenamente vigente, determina el concepto de "precio justo", cuando reconoce explícitamente a las partes el "derecho de preferencia" para la adquisición de la energía que le sobre a uno de los socios (Paraguay) a justo precio.
Pero, y entonces ¿qué es realmente el precio justo? Basándonos en afirmaciones de la influyente senadora brasileña Gleisi Hoffmann del PT/PR, quien "defendía" con firmeza el aumento de la compensación al Paraguay, dejó entrever que el valor de mercado de la energía en el Brasil se ubica entre los US$ 136 y 145 el MWh.
Luego, con ese dato, y determinando que el excedente paraguayo en Itaipú orilla aproximadamente los 36 millones de MWh; la cotización de la energía paraguaya excedente en el mercado brasileño es de US$ 5220 millones.
La cifra birlada
Con la intención de aproximarnos a la cifra birlada al Paraguay, debemos descontar el costo de producción del MWh en la central hidroeléctrica, el cual ronda los US$ 42 el MWh. A pesar de esa resta, obtenemos la nada despreciable suma de US$ 3.708 millones anuales, que debido a ciertos artilugios no ingresan a nuestro país. Esta cifra u otra muy aproximada es el precio justo del excedente de la energía paraguaya en Itaipú
La "nueva abogada del Paraguay", Gleisi Hoffmann, defendía férreamente la modificación de la fórmula del cálculo de la compensación paraguaya en Itaipú, que era de US$ 2,83 el MWh, proponiendo aumentar a US$ 8,49 el MWh.
Para tener una idea, de los US$ 3.708 millones obtenidos como precio justo, que debería abonarse al propietario, la nueva compensación brasileña al Paraguay prevé la suma de US$ 305 millones anuales. Es decir, ni siquiera se llega al 10% de lo que el Brasil debería abonar al Paraguay.
Además, US$ 8,49 el MWh establecido como nuevo monto de compensación es un insulto al Paraguay, dado que el excedente paraguayo se cotiza en aproximadamente US$ 100 el MWh.
Así también, de estos cálculos obtenemos varias conclusiones, siendo una de ellas que las empresas mayoristas y minoristas de venta de energía en el Brasil terminan obteniendo ganancias muy superiores que la del mismo propietario. Más del 90% de la diferencia entre el precio justo y la compensación aprobada días pasados termina en manos privadas, quienes injustamente se enriquecen del excedente paraguayo. Ni siquiera el pueblo brasileño es beneficiado con el subsidio energético que le regala el Paraguay.
Precio que cobra al Uruguay
No olvidemos que el Brasil vende el excedente paraguayo a US$ 300 el MWh al Uruguay y, por fuerza del Tratado, el Paraguay no puede contar con la libre disponibilidad de su excedente energético, y acá nuevamente cito a la senadora Gleisi Hoffman, quien en un arranque de sinceridio expresó a sus colegas senadores que "
es justo que el valor sea corregido, ya que de acuerdo con el Tratado, el Paraguay está obligado a vender la parte de la energía que no consume al Brasil, hasta el 2023. El Paraguay podría bien vender esa energía a otro país, pero por fuerza del Tratado está obligado a venderla a nosotros
".
Concluyendo y corrigiendo a la senadora, el Paraguay no está obligado a vender su energía, "
está obligado a ceder
"; término muy distinto, dado que la cesión implica una compensación, y no el precio justo por la venta, que la senadora hábilmente pretende engañar.
Por todo ello, afirmo que no podemos preciarnos de nuestra independencia absoluta, cuando seguimos dependiendo del humor y del criterio político del agresivo Congreso brasileño, que, en un supuesto gesto de ayuda al Paraguay, procedió a triplicar las migajas recibidas por la energía paraguaya.
El Paraguay no debe ver triplicada la compensación que recibe por su excedente; el Paraguay desea el precio justo por su energía llevada al Brasil.
La independencia real
Nuestro país obtendrá su independencia real cuando el Brasil y la Argentina nos traten como socios, y no como "mendigos" en Itaipú y Yacyretá.
Hoy festejamos que somos un país soberano, pero independiente en la administración de nuestros recursos hidroeléctricos, aún estamos muy lejos. Para el caso de Itaipú, el Paraguay festeja su Bicentenario dependiendo enteramente de la voluntad política del Brasil.
Ayer, las cadenas españolistas fueron rotas por los próceres en un arrebato de coraje y valor; hoy, nuevas cadenas asfixian y expolian al Paraguay, en sus recursos naturales, a la espera de la generación paraguaya que las rompan.
Deseo firmemente que la generación que festeje el Tricentenario en el 2111, lo realice nuevamente evocando a los próceres de 1811, como así también a los nuevos próceres del 2011, quienes tenemos el desafío de independizar al Paraguay del Brasil y la Argentina en la administración de las binacionales.
Esa nueva independencia; dejando de lado las armas y el cañón apuntando a la residencia de Velazco, solo la lograremos a través de la acción judicial en la Corte Internacional de Justicia.
Hoy, más convencido aún, afirmo que el Paraguay tiene la razón jurídica en Itaipú, dado que los mismos senadores brasileños reconocieron la desigualdad y abuso al que somete el Brasil a su "socio pobre" en Itaipú.
Por todo ello, sumado al abuso confeso en Itaipú, la negatoria de la devolución del Cañón Cristiano y los Archivos Históricos, robados en la Guerra de Exterminio; el Paraguay se encuentra en la senda indefectible de recurrir a la Corte Internacional de Justicia, para encontrar en razón el Derecho que hace 200 años vulnera el Brasil al Paraguay
Yugos
Hoy, a 200 años, si bien nos liberamos completamente del yugo español, no podemos afirmar que el Paraguay es totalmente independiente.
Espejito
Ese aumento de compensación... constituye el nuevo espejito para seguir exprimiendo y acallando a la República del Paraguay.
Parásito
Las empresas mayoristas y minoristas de venta de energía en el Brasil terminan obteniendo ganancias muy superiores que las del mismo propietario.
Regalo
Debe señalarse y enfatizarse que no es el pueblo brasileño el que recibe el beneficio del subsidio energético que le regala el Paraguay.