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Alberto Barreix, economista y principal líder del BID, visitó nuestra capital para presentar el libro denominado “Recaudar no basta. Los impuestos como instrumento de desarrollo”, que detalla los problemas de la política tributaria de los países de América Latina y el Caribe (ALC).
Se cree que el fortalecimiento fiscal de la región es un mero subproducto de la bonanza de precios de las materias primas como commodities (BID, 2008). Sin duda, el auge de los precios del petróleo, de los minerales y de los productos agrícolas, especialmente en el pico de 2008, contribuyó a mejorar la posición fiscal en varios países. El estudio del BID encuentra que en ocho países con abundancia de recursos naturales no renovables los ingresos fiscales derivados de su explotación (incluidos los impuestos, regalías e ingresos de las empresas estatales transferidos al gobierno) se duplicaron entre 1994-98 y 2005-10 (aumentando en promedio del 3,9% del PIB al 7,9% del PIB). Sin embargo, para el conjunto de la región, ese fenómeno fue menos pronunciado: las rentas fiscales por concepto de impuestos y regalías de los recursos naturales pasaron del 1,1% del PIB a comienzos de los noventa al 1,9% del PIB en la segunda mitad de la década de 2000 en promedio en los 21 países de la región con información comparable. Se trata de un factor importante, pero ciertamente no es la causa principal del aumento de la carga fiscal total en ese mismo período.
Durante una conversación que mantuvimos con Barreix en un céntrico hotel de nuestra capital, dijo que lo importante es mejorar la calidad de los impuestos. Paraguay recién empieza; la renta es baratísima porque nadie tiene por renta 10%. El IVA se empieza a generalizar, van por buen camino, nos decía.
“Hay tres pilares: el IVA, la imposición a la renta de la empresa y la renta personal, además de la seguridad social. Paraguay ya las tiene, ahora le va a llevar un tiempo cobrar. Yo creo que Paraguay tiene que tener miedo a nada porque va por buen camino”, refirió el técnico del BID.
Se debe tratar de que los impuestos al trabajo no sean altos en América Latina donde existe una gran ventaja comparativa en la producción de bienes naturales y dineros agrícolas. Insistió en que lo importante es el gasto y no hay país que no mejore si no hace una gran inversión en educación, en salud y si es posible en infraestructura. Para Barreix, el país tiene que hacerse responsable y gastar bien en educación, en salud e infraestructura y para eso se precisa de los impuestos. Hay que tener una mínima actividad del Estado, decía.
Con las binacionales
La presión fiscal en Paraguay estaba en 13% del PIB medida con otros criterios y en el 2012 llegó al 20,5% del PIB creciendo casi un 50% (el promedio de la región es 24% del producto). Tres puntos de ese 20,5% pertenecen a las represas (Itaipú y Yacyretá), como Panamá que tiene el Canal de Panamá y le aporta como tres puntos.
En la nueva medición del BID, a la presión fiscal de nuestro país se agregaron, básicamente, las represas. Después hay que sumarle lo que el BID llama la presión fiscal ajustada que incorpora seguridad social privada, pensiones. En el caso de Paraguay y Panamá están los recursos naturales renovables, en tanto que Chile, Perú y México tienen los no renovables como minerales y petróleo.
Cabe recordar que para el Ministerio de Hacienda, la presión tributaria del año pasado equivale a 12,3% del PIB como resultado de una medición que solo incluye la recaudación impositiva, no el aporte de las binacionales ni a la seguridad social.
Reformas tributarias
Conforme al BID, las reformas tributarias para el desarrollo inclusivo que requieren nuestros países deben respetar cinco principios básicos: 1°) Las reformas deben incluir impuestos que favorezcan a los pobres. 2°) Deben establecer sistemas fiscales más sencillos con bases tributarias más amplias ya que la mayoría de los sistemas fiscales de la región son demasiado complejos. 3°) Las administraciones tributarias deben fortalecerse para que todos los ciudadanos y las empresas cumplan con sus obligaciones tributarias. Reducir la elevada evasión fiscal y crear instituciones que garanticen que todos los agentes económicos y ciudadanos contribuyan con su parte al esfuerzo colectivo es un elemento esencial de la legitimación social. 4°) Son necesarios acuerdos y consensos institucionales para garantizar que los gobiernos locales tengan los recursos necesarios para actuar como agentes del desarrollo. Para que la descentralización del gasto público sea sostenible, deben fortalecerse las fuentes de recursos propios de los gobiernos locales. 5°) Las reformas tributarias para el desarrollo deberían crear sistemas fiscales que miren hacia el futuro ya que la región tiene una extraordinaria dotación en recursos naturales.
20,5%
El 20,5% encontrado por el BID como presión fiscal del Paraguay está muy cerca del 24%, que representa el promedio de la región de América Latina y el Caribe.
Doble
En 8 países con abundancia de recursos naturales no renovables, los ingresos fiscales derivados de su explotación se duplicaron.
Precios
Se cree que el fortalecimiento fiscal de la región es un mero subproducto de la bonanza de precios de las materias primas como commodities.
Un crecimiento del 50%
La presión fiscal en Paraguay estaba en 13% del PIB, medida con otros criterios, y en el 2012 llegó al 20,5% del PIB, creciendo casi un 50% (el promedio de la región es 24% del producto). Tres puntos de ese 20,5% pertenecen a las usina Itaipú y Yacyretá, como Panamá que tiene el Canal de Panamá y le aporta como tres puntos.
Incluidas las represas
En la nueva medición del BID de la presión fiscal de nuestro país se agregaron, básicamente, las represas como Itaipú y Yacyretá. En el caso de Paraguay y Panamá están incluidos los recursos naturales renovables, en tanto que Chile, Perú y México tienen los no renovables como minerales y petróleo.
* Para el Ministerio de Hacienda, la presión tributaria del año pasado equivale a 12,3% del PIB como resultado de una medición que solo incluye la recaudación impositiva, no el aporte de las binacionales ni a la seguridad social.
* Hay tres pilares: el IVA, la imposición a la renta de las empresas y la renta personal, además de la seguridad social. Paraguay ya las tiene, ahora le va a llevar un tiempo cobrar, según Alberto Barreix, economista y principal líder del BID, para quien Paraguay tiene que tener miedo a nada porque va por buen camino en materia tributaria.
broa@abc.com.py