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De igual forma, 18.000 personas dejaron de ser pobres en las zonas rurales. En efecto, de cada tres personas que salieron de la pobreza, dos provienen de las zonas rurales, indicando que una de las zonas de atención prioritarias donde se deberían intensificar los programas productivos y sociales es esta.
Incidencia de la pobreza extrema
La pobreza extrema, sin embargo, mostró un incremento porcentual relevante, rompiendo la tendencia decreciente que venía mostrando en los últimos cuatro años. En el país hay 33.000 nuevos pobres extremos, lo que representa un incremento del 0,4% con respecto al año 2013. Sin embargo, la cifra más preocupante se encuentra en las zonas rurales, donde la pobreza extrema aumentó 1,6%, que no parece significativo pero que corresponde a 48.000 personas que pasaron de la pobreza a la pobreza extrema.
Una interpretación preliminar del incremento de la pobreza extrema se puede encontrar en la disminución de los ingresos de los grupos más pobres, que en las zonas rurales se redujo el 1,5%, mientras que el valor de la canasta básica de alimentos se incrementó 2,1%. Si se toma el dato correspondiente solo del grupo más pobre se observa que sus ingresos se redujeron 4,4% en el último año, también en las zonas rurales. Se recuerda que la inflación de los productos alimenticios del año 2014 ha sido del 4,2% según datos del Banco Central del Paraguay, afectando necesariamente a aquellos hogares con menores ingresos.
Las zonas urbanas presentan niveles decrecientes de pobreza extrema, donde 15.000 personas han dejado la pobreza extrema en el último año.
El año 2014 no fue definitivamente un año de buen comportamiento del empleo. Según la EPH todos los indicadores asociados han mostrado muy pocos avances. La tasa de actividad ha disminuido (menos 1%), al igual que la tasa de ocupación, (menos 1%). Por su parte el desempleo abierto se ha incrementado, del mismo modo que la subocupación.
Un detalle interesante es el que ni en las zonas urbanas los indicadores de empleo presentan comportamientos positivos, indicando que definitivamente en el año 2014 la economía se ha frenado, y el desempleo, muchas veces asociado al fenómeno del contrabando, ha impactado en la calidad de vida de la población.
Estructura de los Ingresos: el trabajo
Como en años anteriores, la fuente principal de los ingresos familiares corresponde al trabajo, es decir a actividades remuneradas. Más del 88% de la población se vincula a las actividades productivas, comerciales y de servicios, donde los programas estatales como Tekoporã y Adulto Mayor tienen una participación muy baja, sin constituir necesariamente una debilidad de tales programas, sino más bien de la concentración de los ingresos en el trabajo. Además, atendiendo que en el año 2014 el sector agropecuario tuvo un buen comportamiento, se asume que las cadenas respectivas han generado y mantenido una buena cantidad de empleos. De igual forma, el sector de la construcción ha crecido significativamente en 2014, con el incremento consecuente de obreros para hacer frente a la demanda creciente.
Un aspecto resaltante es el aumento, aunque muy pequeño en porcentaje, de las ayudas familiares que se produjeron por envío de remesas internas, mientras que los ingresos por remesas del exterior disminuyeron un poco.
Las diferencias de ingresos entre departamentos, zonas urbanas y rurales es significativo y respondería al comportamiento de las distintas economías regionales. En una siguiente entrega se analizaran estos datos a profundidad.
Bienes y confort del hogar
En cuanto al equipamiento del hogar y a los servicios disponibles la EPH muestra que la tendencia del mejoramiento de las condiciones del hogar se mantienen y hasta se intensifican. A nivel país la disponibilidad de comunicación telefónica de los hogares, sea a través de la compañía estatal o de las empresas privadas, sigue incrementándose y se encuentra ya casi en el límite de su crecimiento. Los hogares también han incrementado la disponibilidad de transporte propio, sea este un automóvil o una motocicleta. Por último, el servicio de televisión por cable o por antena parabólica sigue incrementándose de forma sostenida, inclusive en las zonas rurales. Así, una dotación de bienes y el acceso a diferentes servicios parecen mejorar sustancialmente las condiciones de vida y el confort en los hogares paraguayos.
Educación y salud
Los principales indicadores de educación, población analfabeta, promedio de años de estudio y asistencia a instituciones educativas han disminuido sensiblemente y no muestran los avances de otros años. En el caso de los principales indicadores de salud, como acceso a salud, se observan avances significativos a escala nacional y sobre todo a nivel rural.
La ciudad, el espacio privilegiado para trabajar, estudiar y ascender socialmente
Con la diversificación de su base económica terciaria, las ciudades paraguayas fortalecen su peso en la organización económica y social de las diferentes regiones del Paraguay. Efectivamente, en el proceso reciente de urbanización que experimenta el país, lo novedoso radica en el surgimiento de una multitud de ciudades que cubren el territorio nacional de manera equilibrada y homogénea. Asimismo, las principales aglomeraciones ya no son el único escenario donde se desarrolla y diversifica la economía terciaria. Nuevos polos urbanos se imponen en la Región Oriental como en el Chaco. La atracción demográfica generada por los nuevos espacios de vida que constituyen las ciudades engendra nuevas demandas inducidas, y por ende, nuevas inversiones y nuevos empleos.
En este contexto, las áreas urbanas participan activamente en la generación de ingresos y por ende en la disminución de la pobreza. Además, las áreas urbanas experimentan un marcado aumento de su parque habitacional, mientras que el de las áreas rurales crece lentamente. Esto denota entonces una cierta capacidad de absorber nuevos contingentes poblacionales y de integrarlos al mercado laboral. Las cifras de pobreza de 2014 confirman las tendencias recientes y señalan que los niveles de pobreza y de pobreza extrema disminuyen mucho más en áreas urbanas, mientras que aumentan ligeramente en las áreas rurales.
Si bien la intervención en áreas rurales es primordial, porque se concentra allí la mayor proporción de pobres, es primordial también atender a las ciudades, que se erigen como poderosas palancas para luchar contra la pobreza. Asimismo, la concentración de servicios y de equipamientos públicos en puntos específicos dará consistencia a una red urbana que está por construirse. Las ciudades y los pueblos deberán actuar como plataformas de instalación de servicios y deberán estar bien interconectadas, de modo que sean accesibles a toda la población rural circundante.
De modo de fortalecer la emergencia urbana y potenciar la capacidad de las ciudades de incidir en la disminución de las cifras de pobreza, es necesario también direccionar las inversiones privadas hacia estos centros urbanos.
Lo urbano ya no es solo Asunción, Ciudad del Este o Encarnación, sino que incluye a una decenas de ciudades regionales, denominadas también emergentes o intermedias que desde hace muy poco tiempo reflejan el dinamismo económico regional y por lo tanto atraen población, disminuyendo la presión demográfica que históricamente ha sufrido Asunción. Resulta absolutamente imprescindible anticipar un escenario que ya resulta inevitable, el del Paraguay urbano. De este modo, ignorar a las ciudades significará también velarse los ojos y no prevenir el crecimiento de barrios precarios y de cinturones de pobreza.
El 88%
de los ingresos de la población se vincula a las actividades productivas, comerciales y servicios y en menor medida de las ayudas estatales.
48.000
personas que pasaron de la pobreza a la pobreza extrema en la franja de la población rural, el aumento fue del 1,6% frente al año anterior.
15.000
Personas superaron la franja de la pobreza extrema en el último año, dentro del grupo de la población urbana que viene reduciendo año a año.
Remesas
Las ayudas familiares por envío de remesas internas aumentaron, mientras que los ingresos por remesas del exterior disminuyeron un poco.
Empleo
En el año 2014 no hubo un buen comportamiento del empleo. La tasa de actividad disminuyó 1%, al igual que la tasa de ocupación, (menos 1%).
Incidencia de la pobreza
La incidencia de la pobreza en el año 2014 se redujo solamente en 1,2% en relación al año 2013. Analizando las cantidades absolutas se observa que casi 60.000 personas salieron de la pobreza en el último año, menos de la mitad si se compara con 175.000 personas que dejaron de ser pobres en el año 2013.
Más pobres extremos
La pobreza extrema mostró un incremento porcentual relevante. En el país hay 33.000 nuevos pobres extremos, lo que representa un incremento del 0,4% con respecto al año 2013. Sin embargo, la cifra más preocupante se encuentra en las zonas rurales, donde la pobreza extrema aumentó 1,6%.
En cuanto al equipamiento del hogar y a los servicios disponibles, la EPH muestra la tendencia del mejoramiento. Así, una dotación de bienes y el acceso a diferentes servicios parecen mejorar sustancialmente las condiciones de vida y el confort en los hogares paraguayos.
Los principales indicadores de educación, población analfabeta, promedio de años de estudio y asistencia a instituciones educativas disminuyeron y no muestran los avances de otros años. También se observan avances significativos a escala nacional y sobre todo a nivel rural.
Las cifras de pobreza de la Encuesta de Hogares 2014 confirman las tendencias recientes y señalan que los niveles de pobreza y de pobreza extrema disminuyen mucho más en áreas urbanas, mientras que aumentan ligeramente en las áreas rurales.