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Las hierbas medicinales o aromáticas son de consumo cotidiano en Paraguay, por lo que su utilización en el mercado interno se satisface actualmente con escasos cultivos y, en algunos casos, con la mera recolección de las hierbas.
Simplificando, las hierbas se pueden agrupar en tres categorías. La primera es la denominada hierbas medicinales, que disponen de principios activos, es decir que tienen una acción farmacológica específica, pudiendo ser beneficiosa o perjudicial. En segundo lugar se encuentran las plantas oficinales, aquellas que tienen uso medicinal y pueden formar parte de algún medicamento preparado. Finalmente, la tercera categoría está compuesta por las plantas aromáticas, que disponen de esencias.
Las condiciones ecológicas, es decir la temperatura, precipitaciones, humedad y tipo de suelo son apropiadas para el crecimiento de una vasta gama de hierbas medicinales. Sin embargo, los sistemas comerciales tradicionales solo se han enfocado en el mercado interno y de forma poco innovadora, manteniendo en muchos casos las prácticas extractivistas ante que productivas, reproduciendo las antiguas formas de producción que hoy ya no son satisfactorias ni competitivas.
No debe olvidarse que varias plantas medicinales y aromáticas movilizan a la industria de esencias y derivados, ameritando un abordaje de cadena de valor que considere a los productores, las industrias y el mercado nacional como internacional.
Las principales ventajas de las hierbas medicinales son, además del menor costo, sus características menos invasivas y con menor cantidad de efectos secundarios en los pacientes. Además, en el contexto actual de la sociedad y sistemas de vida cada vez más exigente y acelerada que experimentan tanto países occidentales como orientales, las terapias alternativas, el sabor de lo exótico y el valor de lo natural adquieren una mayor importancia.
Las oportunidades de producción de hierbas medicinales del país son amplias, pero requieren necesariamente de varios ajustes en el ámbito productivo, industrial y sobre todo comercial. Al tratarse de un negocio de nichos, es decir de volúmenes aun no muy significativos, al menos para la capacidad productiva actual, se requieren un conjunto de acciones destinadas a vincular a los comercializadores paraguayos con los compradores en las diferentes regiones del mundo. El desconocimiento del funcionamiento de algunos mercados, así como sobre las exigencias de calidad e inclusive sobre las ventajas de la producción orgánica, son a la vez limitantes y generadores de nuevos negocios para los productores agrícolas paraguayos.