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El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un descenso de 1,19 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 61,53 dólares.
La preocupación por la marcha de la economía china lastró el precio del barril de Brent, según los analistas, después de que Pekín divulgara datos sobre una ralentización de su producción industrial.
A pesar del acuerdo que alcanzaron la semana pasada la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros grandes productores para reducir la producción, el crudo europeo cerró esta semana con un declive del 2,53% respecto a la apertura del pasado lunes (61,91 dólares).
Cotización del WTI
Por su parte, de acuerdo con la misma agencia, este caso un despacho desde Nueva York, el precio del petróleo de Texas (WTI) para entrega en enero abrió el último fin de semana con un descenso del 0,61 % (-0,32 dólares) y a las 09.05 hora local (14.05 GMT) se cotizaba a 52,26 dólares el barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex).
En lo concerniente al precio del barril de la OPEP, se informa que bajó el jueves último 0,9%, hasta US$ 58,67, según informó en Viena el grupo petrolero
Agrega que el valor del crudo de la OPEP está así a menos de un dólar por encima del mínimo anual de US$ 58,09 marcado el 29 de noviembre último, al que llegó siguiendo una tendencia generalizada a la baja que comenzó en octubre.
La pasada semana, la OPEP y sus aliados pactaron reducir sus extracciones para afianzar los precios ante un exceso de demanda mundial en 2019.
En esa línea, la OPEP redujo ayer la previsión para la demanda de su crudo en 2019, al cifrarla en 31,4 millones de barriles diarios (mbd) , 100.000 menos que lo calculado hace un mes.
Sin embargo, la reducción de los precios o prevista para este año y el siguiente no tendrá un efecto en el crecimiento de la demanda de crudo, puesto que se verá frenada por la moderación de las perspectivas económicas, indicó hoy la Agencia Internacional de la Energía (AIE), según otro despacho de EFE, en París.