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El gremio presidido por Beltrán Macchi asegura que al aumentar salarios, sin criterios técnicos fehacientes ni justificación financiera, se envía un claro y contradictorio mensaje a la ciudadanía, puesto que, por un lado, se predica una mayor necesidad de ingresos fiscales, pero se muestra una calidad del gasto inaceptable.
Pese a las normativas existentes de contención del gasto como la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF), se continúa destinando recursos en niveles sobredimensionados al pago de salarios, lo que tampoco se refleja en un desempeño de mayor calidad del Congreso, lo que termina en un gasto ineficiente y que no responde a las múltiples demandas y necesidades de la población.
Reforma de ley del funcionario público
En ese sentido, la CNCSP sugiere impulsar una reforma de la Ley del Funcionario Público para frenar los desmedidos privilegios otorgados, tal como se puede observar en el gráfico, donde se toma como ejemplo los grandes saltos que ha venido aplicando la Cámara de Diputados, en materia salarial.
Este mismo gremio ya había advertido semanas atrás, que Paraguay se encuentra entre los países con salario público más alto. La compensación a los empleados absorbe casi la mitad de todos los gastos corrientes, lo que representa entre el 11% y 12% del Producto Interno Bruto (PIB).
Con estos números, refiere la CNCSP, que Paraguay se ubica entre los países con el gasto salarial público más alto de América Latina y el Caribe y muy por encima del promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Indican también que los altos niveles de gasto en salario se traducen en la imagen que tiene la población sobre sus gobernantes, tal como se observa en las mediciones del Latinobarómetro.
El gremio hace referencia al último estudio del Banco Mundial (BM) denominado “Diagnóstico Sistemático del País”, donde indican que los elementos clave para reencauzar las finanzas públicas de nuestro país fueron sobrepasados con maniobras gestadas desde el propio Congreso Nacional y hasta desde el Poder Ejecutivo. En ese informe, el organismo advierte que desde el 2012 nuestro país viene arrastrando un descalce hasta el tope de lo que establece la Ley de Responsabilidad Fiscal.
La CNCSP reitera que los puntos focales sobre los cuales el gobierno debe centrar sus esfuerzos para el saneamiento de sus finanzas y la generación de un espacio fiscal son la contención y mejoramiento de la eficiencia del gasto público, principalmente el salarial.
Despilfarran G. 3.000 millones
Esta semana fue repudiado el “regalo” de G. 3.000 millones en aumentos salariales, a 18 funcionarios de la Cámara de Diputados. Estos funcionarios recibieron jugosos aumentazos (G. 166 millones por este año para cada uno). El selecto grupo de funcionarios es del entorno del presidente de la Cámara de Diputados, Miguel Cuevas (ANR, Añetete), y sin ningún criterio de por medio, así como sus aliados, fueron los que obtuvieron los aumentos millonarios desde enero. Entre los beneficiados se encuentran funcionarios leales al titular de la cámara, que recibieron alteraciones salariales de más de G. 18.925.800. En enero se habría pagado en concepto de bonificaciones montos superiores al permitido por el decreto reglamentario establecido en la ley de presupuesto (30%). El caso más insólito es el que corresponde al director general de Administración y Finanzas. Cabrera Cabral es compadre del diputado Arnaldo Samaniego (ANR) y este último es quien el año pasado presidió la comisión bicameral de presupuesto.
Cabrera, aunque tiene una antigüedad de 18 años en la institución, su salario es superior al de un diputado que no forma parte de la mesa directiva de la Cámara. Otro caso llamativo es el de María Inés Talia, cuyo sueldo se aproxima al de un legislador y se iguala al de un ministro, cuyas responsabilidades son superiores. La funcionaria tiene una antigüedad de 23 años y logró que su salario ascendiera a más de G. 30 millones, entre otros varios casos.