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“Tus clientes más insatisfechos son tu mejor fuente de aprendizaje” - Bill Gates
Este breve análisis fue realizado como un simple usuario final, autodidacta, que posee algunos conocimientos técnicos, producto de la experiencia en el sector público y privado, analizando solo resultados, sin hacer juicio de valor alguno y manifestando no tener conflictos de intereses al respecto. Se trató de analizar más de lo que se hace y menos de lo que se dice, tratando de que el árbol no impida ver el bosque, ante la falta de acceso a información pública.
El tema energético y, más concretamente, el sector eléctrico, debe ser una de las prioridades en la agenda de todos los candidatos a presidente de la República y, como se suele decir, “todo tratamiento debe partir de un buen diagnóstico” y si los médicos recurren a las interconsultas para todo caso crítico, porque no emularles nosotros los técnicos, esa es la idea.
En octubre 2017 escuchábamos decir al Ing. Luis Villordo, gerente de Planificación de la ANDE, que la empresa eléctrica “estima que en 2025 ya usaría casi toda la energía de Itaipú y EBY” (1) y aclaraba que “la ANDE destaca que el crecimiento del consumo mantiene un ritmo promedio del 10% desde hace unos años e indefectiblemente se necesitarán más obras de generación, para lo cual se tiene previsto invertir más de US$ 2.000 millones hasta el 2025. Entre las alternativas inmediatas figuran dos nuevas represas propias sobre el río Paraguay, con potencias de 72 y 96 MW, respectivamente. También se construirán 19 pequeñas centrales hidroeléctricas sobre los ríos menores”.
Tal afirmación fue realizada luego de que el Poder Ejecutivo aprobara el Plan Maestro ANDE 2016-2025 (Decreto PE N° 7741 del 25/09/17) (2) por un total de US$ 6.938 millones, de los cuales US$ 2.203 millones serán destinados a (nuevas) fuentes de generación.
Tanto aquella vez como ahora, algunos técnicos del sector teníamos nuestras serias dudas al respecto de priorizar al sector generación en el Paraguay, ya que si hoy “cedemos mucho más energía eléctrica de lo que consumimos”, ¿cuál sería el motivo real que lleve a la ANDE a realizar semejante esfuerzo técnico para plasmarlo en ese Plan Maestro. Con ello no afirmo que no sea importante pero sé que no es urgente. (10)
Para demostrarlo, en mi caso particular, esperé a tener (calcular) los resultados 2017 del SIN (Sistema Internacional Nacional) de nuestro país, de modo a emitir una opinión responsable al respecto, en la creencia de que “si se parte de datos falsos, el resultado será erróneo”.
La semana pasada también pude leer en la prensa escrita (3) que, según un informe del Departamento Comercial de la ANDE, “registró un 5,8% más de consumo de la energía eléctrica en el Paraguay durante el 2017” y se aportó algunos datos (no información) de forma muy similar a lo realizado exactamente un año atrás cuando se señalaba (7): “La ANDE tiene su plan maestro que se actualiza cada dos años, el cual traza un horizonte de 10 años al cual la estatal debe llegar. En ese sentido subrayaron que la demanda de la ANDE en el 2015/16 creció un 9,8%”.
Pero los datos (duros-fuente VMME, entre otros) nos muestran lo siguiente:
1) En el 2016, la suma de las tres fuentes de generación (75,5% Itaipú+ 16,5% EBY + 8% Acaray) aportaron 14.831 GWh al SIN paraguayo en términos de energía; pero la ANDE facturó, como bien señaló el representante del Departamento Comercial, 10.415 GWh, implica que la energía no facturada en 2016 fue del orden del 30%, aunque oficialmente las pérdidas totales asumidas fueron del 25.6%.
En el 2017 ocurrió casi lo mismo, las mismas tres fuentes citadas precedentemente (86% Itaipú + 8% EBY + 6% Acaray) aportaron 15.576,5 GWh al SIN nacional en términos de energía, pero la ANDE facturó, como bien señaló el representante del Departamento Comercial, 11.026 GWh. Esto implica que la energía no facturada en 2017 fue del orden del 29%. Aunque, según publicaciones periodísticas, las pérdidas totales oficiales rondarían el 24,4%, porque la ANDE recuperó unos US$ 2 millones de las conexiones ilegales este 2017 (13).
2) Se puede observar en el ítem anterior que la distribución del aporte de las fuentes citadas al SIN paraguayo cambiaron sustancialmente entre el 2016 y 2017. Así, Itaipú pasó de aportar el 75,5% (2016) al 86% (2017), la EBY decreció del 16,5% (2016) al 8% (2017) y cierra Acaray, que también decreció del 8% (2016) al 6% (2017).
3) Lo concreto, y resumiendo, es que la ANDE en 2017 retiró solo el 13% de la producción de Itaipú, más el 6% de la producción de la EBY, por un total de 14.690,7 GWh (12,5%) de las binacionales, las cuales, en conjunto, produjeron de 117.215 GWh. (4) y (5).
4) Por añadidura, la ANDE retiró apenas el 12,5% de la producción conjunta de las binacionales, entonces es evidente que se ha cedido a nuestros socios condóminos el 37,5% restante, del 50% de la producción que nos corresponde por derecho propio, aunque algunos “compatriotas conocidos como de 60 Hz” lo traten de manipular, seguramente con algún propósito o mandato (8) camino al 2023 y como bien decía Upton Sinclair: “Es difícil hacer que un hombre entienda algo cuando su salario depende de que no lo entienda”.
Para ser más claro aún al lector lego, este 2017 apenas hemos consumido 1/3 de la energía que nos corresponde por derecho en las binacionales. Aún disponemos del 2/3 restante, sobre las cuales debemos ejercer plenamente nuestra soberanía de inmediato, salvo que se quiera mantener el statu quo como a la fecha.
No hay que olvidar que en el 2016 la Itaipú (y la EBY) batieron récords con su producción, por ende, también fue récord nuestra cesión (8.379,4 EBY + 40.346,5 Itaipú = 48.726 GWh).
Si bien este 2017 fue un año hidrológico más desfavorable para las binacionales, las que produjeron menos y, por ende, la cesión también fue menor en un 10% (43.917 GWh); sin embargo, tal como fue demostrado precedentemente, la relación “cesión-consumo total del SIN nacional se mantiene mayor o igual a 3 (tres)”.
5) Justamente uno de los argumentos principales esgrimidos por la ANDE para solicitar el aumento tarifario en marzo 2017 (Decreto PE N° 6904/17) y citado como agravante en el Plan Maestro 2016-2025 (Decreto PE N° 7741/2017), fue el crecimiento sostenido de la demanda del SIN PY en un escenario ideal (mas no real). Sin embargo, los datos presentados en el Plan Maestro en cuestión, podemos señalar con absoluta certeza, estaban sobrevalorados, ya que se estimó una demanda máxima de potencia de 3.732 MW para el 2017, de 4.043 MW para el 2018 y así por delante. Basta con recordar que solo a mediados de diciembre pasado, el SIN paraguayo registró un nuevo récord de demanda de potencia máxima, con 3.135 MW, muy lejos de lo calculado por ANDE (6).
Por ello, la siguiente planilla muestra la evolución real del aporte de las fuentes citadas al SIN nacional en el interanual, desde el 2013 (año base) al 2017 con datos oficiales (VMME, entre otros).
La primera fila demuestra que la fuente Itaipú aportó un 20,1% más al SIN nacional en el 2017 respecto al 2016, así como un 42,9% más, si comparamos 2017 respecto al 2013 (año base).
Lo mismo podemos decir de la EBY (segunda fila) cuyo aporte al SIN 2017 decreció aproximadamente un 50% respecto al 2016 y también respecto al 2013 (cuando en la EBY aún no se había adecuado las barras de salida a 500 kV, pero aportaba mucho más energía al SIN nacional que a la fecha, a pesar de las inversiones.
De modo similar podemos decir del aporte de la central Acaray (CH ACY) 2017 (tercera fila) al SIN también decreció en 2017 respecto al 2016, aunque ligeramente superiores al 2013.
Cabe aquí señalar que la máxima producción de la CH ACY en el periodo señalado se dio en el 2016, con 1.289 GWh, de los cuales se exportó a Ebisa (Argentina) apenas (9,3%) = 119,6 GWh.
Como referencia regional podemos agregar que Argentina importó ese mismo año (2016) del Uruguay (749 GWh) y del Brasil (494 GWh), o sea importó mucho más energía de los vecinos que de nuestro país, en rigor el único en la región que cuenta con auténticos excedentes hidroenergéticos, a pesar del buen ambiente.
Por ello, en la cuarta fila se evidencia que la venta de energía de ANDE (CH ACY) a Ebisa también decreció notablemente respecto al valor señalado (2016) precedentemente, ya que en el 2017 apenas se llegó a 70 GWh vendidos. Se lo incluye en la planilla, porque esta venta de energía (exportación) es realizada con precios consensuados de mercado entre las partes, muy diferente al concepto obligado de “cesión de energía”, teóricamente, la ANDE podría llegar a vender hoy el 100% de la producción de la CH ACY a terceros países con precios del mercado regionales si buscara mejorar su rentabilidad, aprovechando el buen ambiente bilateral pregonado por la Cancillería.
En la quinta fila se puede visualizar el crecimiento anual y real del consumo eléctrico del SIN nacional, en términos de energía como suma de los aportes de las tres fuentes citadas, o sea incluye la energía no facturada y es descontada la energía exportada de la CH ACY a Ebisa.
Se puede visualizar que el SIN Paraguay 2017 creció un 4,7% respecto al 2016 y solo 23,5% respecto al 2013, en términos de energía.
En la sexta fila se puede verse el crecimiento anual, real, de la demanda máxima de potencia del SIN paraguayo, donde se puede ver que, si bien la demanda máxima en 2017 creció un 7,5% respecto al 2016 y no llega al 30% respecto al 2013.
La ANDE usa para sus proyecciones siempre este indicador de demanda máxima, pero aparentemente no se preocupa de otros indicadores operativos, resultados de la gestión actual, por ejemplo las pérdidas totales (estimadas, pero no medidas) o también se puede corroborar, a partir de estos datos mencionados, que el factor de carga empeoró, donde “el factor de carga es la relación entre el consumo durante un periodo determinado y el consumo que habría resultado de la utilización continúa de la potencia máxima contratada durante ese período”.
Porque no considerar el costo medio de la energía de ANDE (anual) resultante del MIX de fuentes señaladas, si luego el costo producto de la gestión de comercialización es simplemente traspasado a la venta, con la aplicación de un markup al usuario final.
Aquí cobra fundamental importancia el costo medio anual de la energía de Itaipú resultante para la ANDE (CM IB) en US$/MWh, ya que hoy constituye el 86% de la fuente de generación para la ANDE en modo optimización, expresado como “Tarifas monómicas (US$/MWh)”, entendido como “monto total que equivale a un precio único por concepto de venta o compra de energía y potencia. Es igual al ingreso o costo total por venta o compra de energía y potencia dividido por la energía total vendida o comprada”. (*) = estimado
Podemos visualizar del periodo analizado que todos los indicadores mencionados precedentemente han desmejorado, a pesar de las inversiones realizadas. Por ejemplo, el factor de carga (primera fila) ha desmejorado, aunque las pérdidas totales oficiales se han mantenido cuasi constantes (indicando que nunca fue prioridad) y, fundamentalmente, los CM IB, que se incrementado en aproximadamente un 20%, hecho que impactó directamente en los costos ANDE (menor rentabilidad) pero que simplemente fue traspasado a la venta = usuario final con el decreto PE N° 6904/17, conocido por el “tarifazo”.
La táctica operativa de la ANDE era clara: “La ANDE redujo al mínimo sus compras de energía de la central hidroeléctrica Yacyretá por una cuestión meramente económica”, según admitió el propio gerente técnico de la institución, Ing. Walter Causarano. (7). Evidentemente los resultados obtenidos demuestran que la táctica operativa (actual, siempre) fue errónea.
Por los resultados 2013 al 2017 mostrados de la gestión actual de la ANDE en el SIN paraguayo nos (de)muestran que no solo los indicadores han desmejorado, sino que se condicen plenamente con la percepción general del usuario sobre el servicio brindado por la ANDE a la ciudadanía.
En gráfico, que lamentablemente quedó al margen por razones de espacio, representábamos la producción de las binacionales vs. SIN nacional a partir del 2011, ya que ese dicho año la EBY llegó a cota definitiva y en (octubre) 2013 la ANDE energiza la línea de transmisión de 500 kV, que constituyen puntos de inflexión para las binacionales, no así para nuestro SIN nacional (siempre rezagados en materia de infraestructura). No tiene mayor sentido compararlo con décadas pasadas, para tratar de sacar un diagnostico actualizado y real de nuestro SIN, que es la finalidad de este paper técnico.
En el material graficábamos la línea inferior, que representa la demanda real del SIN nacional podrá llegar a cortar a la línea del 50% de la producción (conjunta) de las binacionales (Itaipú + EBY) en el peor de los casos más allá del 2030/35, dependiendo siempre de la producción de las binacionales.
No olvidemos que la línea de la demanda del SIN nacional incluye el aporte de la CH Acaray (excluyendo exportaciones a Ebisa) y un componente importante de pérdidas totales (25%) del SIN, que con una gestión de eficiencia energética, esta debilidad puede convertirse en oportunidad (nueva fuente).
En la gráfica se puede deducir que la producción de Itaipú depende sobremanera de la hidrología de la cuenca del Paraná, o sea mayor producción para años húmedos y menor producción en años secos. Sin embargo, también se puede visualizar que la producción de la EBY permaneció casi constante (años secos vs. años húmedos), quizás porque en años secos se prefirió sobreelevar el embalse (9) y en años húmedos se vertió más agua por el vertedero del brazo Aña Cua, lo que puede ser muy fácilmente comprobado. Los MWm de la EBY siempre fueron inferiores a los 2.500 (20% menos de la potencia instalada = 3.100 MWm), lo que implica que el camino crítico del Retrofit de la EBY no pasa precisamente por el Aña Cua.
Conclusión: Evidentemente los datos duros y reales mostrados, convertidos en información, demuestran lo contrario respecto al hito 2025, si mantenemos el statu quo.
Entiendo que no puede haber estrategia en las binacionales sin un plan de acción operativo de la ANDE. En consecuencia, este plan operativo, en modo optimización, fue inocuo según lo visto. La alta estrategia (Cancillería), aún no la sabemos y parece que nadie tampoco, por ello y ante la falta de resultados, aún podemos cambiar la táctica, no así los objetivos estratégicos, que creo yo deberían partir de la recuperación plena de nuestra soberanía hidroenergética en las binacionales, entre otros. Creo que ya es hora de cambiar paradigmas en materia energética y el cambio pasa por tener el diagnostico real y correcto, de modo a facilitarle la toma de decisión a nuestras altas autoridades.
No lo afirmo, pero los gráficos precedentes nos (de)muestran que perfectamente podemos contratar nuestro 50% de la producción de la EBY, que nos corresponde por derecho, tan pronto se termine la próxima LT 500 KV EBY - V. Hayes y/o se instale el próximo gobierno electo (lo que ocurra primero), haciendo borrón y cuenta nueva de todo lo actuado en Yacyretá 2014.
El siguiente paso sería Itaipú 2023, partiendo de la base de no cometer los mismos errores de EBY 2014, aunque la operativa ANDE nos encamine irremediablemente a una mayor dependencia de esa fuente, pero se cuenta con dos documentos válidos nacional e internacionalmente (Acuerdo Lula-Lugo 2009, aprobado por ambos congresos, y el Informe Jeffrey Sachs 2013) como elementos objetivos de toda negociación bilateral, pero en un escenario estratégico de deuda = 0.
Entonces uno se pregunta, ¿por qué la propia ANDE nos dice que se viene el apagón para el 2025, si los resultados nos (de)muestran que se mantiene el statu quo desde el 2013 a la fecha? a pesar de todas las inversiones realizadas. Se nos menciona un déficit de generación en el corto y medio plazo, cuando el principal problema está en otras partes, llamadas distribución (10) y central (60% usuarios), entre otros. Porque se presupuesta una parte importante de los recursos (US$ 2.203 millones) en generación (importante, pero no urgente) de los US$ 6.938 estipulados en el Plan Maestro citado.
Evidentemente el cambio debe comenzar por nosotros mismos (60 a 50 Hz) y ante la duda del proceso realizado e inocuo para el SIN nacional en el periodo analizado, solo nos queda rehacer todo el diagnostico, agotando las interconsultas necesarias (quizás otros Sachs), de modo a poder iniciar un nuevo tratamiento del SIN, más eficiente y eficaz, en la brevedad posible, pero con una visión más amplia, jerárquica más una buena dosis de patriotismo.
Termino diciendo que quizás la culpa no sea 100% de la ANDE, que solo ejecutó ciegamente la política energética del actual gobierno que consiguió frenar la demanda, quizás para ceder más y así obtener en el corto plazo un poco más de royalties y compensaciones, manteniendo nuestra balanza comercial energética históricamente negativa. O sea se prefiere importar energía que no tenemos (exportando dólares) en detrimento de la energía que poseemos abundantemente, pero se prefiere ceder. El mayor problema es el statu quo, por ello el Balance Energético Nacional 2016 nos muestra que la demanda de combustibles 2016/15 subió un 13% contra 4,1% de la energía eléctrica, peor aún seguimos en la era de la leña, que sigue creciendo (1,7%) a pesar de acuerdos energéticos fantásticos (14). Es hora de empezar a sustituir las importaciones energéticas.
Es hora de romper paradigmas, “locura es hacer lo mismo una y otra vez, esperando obtener resultados diferentes”, decía A. Einstein un siglo atrás, creo podemos hacerlo con un nuevo gobierno patriótico que empiece a cambiar de paradigmas y se deje de creer que las soluciones pasan por meras actas fantásticas.
“Puedes pensar que estoy equivocado, pero no por eso debes dejar de pensar”. Dr House.
Prioridad
El tema energético y más concretamente el sector eléctrico, debe ser una de las prioridades en la agenda de todos los candidatos...
12,5%
Lo concreto... es que la ANDE, en 2017, retiró solo el 13% de la producción de Itaipú, 6% de Yacyretá, 14.690,7 GWh (12,5%) de las binacionales.
Cesión
ANDE retiró apenas el 12,5% de la producción de las binacionales y cedió a nuestros socios condóminos el 37,5% restante, del 50% que nos corresponde.
2/3
En 2017 consumimos apenas 1/3 de nuestra energía. Aún disponemos de los 2/3 restantes y sobre los cuales debemos ejercer nuestra soberanía...
Récord
En 2016 Itaipú y la EBY batieron récords de producción, por ende, también fue récord nuestra cesión (8.379,4 EBY + 40.346,5 Itaipú).
Usuario
No solo los indicadores desmejoraron, que se condice con la percepción general del usuario sobre el servicio brindado por la ANDE a la ciudadanía.
Referencias
(1)http://www.ultimahora.com/ande-estima-que-2025-ya-usaria-casi-toda-la-energia-itaipu-y-eby-n1111783.html
(2)http://www.ande.gov.py/plan_maestro.php
(3)http://www.lanacion.com.py/negocios_edicion_impresa/2018/01/19/el-consumo-de-energia-electrica-aumento-58/
(4)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/suministro-de-itaipu-para-la-ande-fue-de-solo-13-1663220.html
(5)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/en-el-2017-yacyreta-suministro-a-la-ande-apenas-el-6-de-su-produccion-1663494.html
(6)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/ande-sobrevaloro-carga-de-potencia-para-justificar-el-incremento-tarifario-1661238.html
(7)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/compran-menos-de-eby-para-optimizar-1601859.html
(8)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/itaipu-intenta-maquillar-provision-1663500.html
(9)http://www.ultimahora.com/por-razones-tecnicas-el-consejo-eby-autorizo-la-elevacion-del-embalse-n601163.html
(10)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/opinion/lo-urgente-vs-lo-importante-1558472.html
(11)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/argentina-pago-por-energia-de-yacyreta-cedida-en-2015-1551071.html
(12)http://www.abc.com.py/edicion-impresa/economia/argentina-pago-por-energia-de-yacyreta-cedida-en-2015-1551071.html
(13)http://www.lanacion.com.py/negocios_edicion_impresa/2018/01/28/ande-recupero-unos-us-2-millones-por-conexiones-ilegales/
(14)http://www.paraguay.com/nacionales/sarubbi-acuerdo-es-fantastico-162289
axelbeni@gmail.com