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A modo de recapitular y conforme con datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 92% de los países del mundo poseen regímenes de salario mínimo legal. En América Latina y el Caribe, prácticamente el 100% de los países cuenta con el mencionado sistema.
En el marco a lo anterior es de recordar que los salarios mínimos pueden ser un elemento integrante para contribuir a la reducción de la pobreza y la desigualdad, así como disparidades entre hombres y mujeres.
Igualmente, es importante resaltar que el objetivo del salario mínimo también ha seguido un proceso de transformación por lo ya no se considera simplemente como herramienta de política aplicable de forma selectiva en algunos sectores de bajos salarios, sino que se ha convertido en un instrumento de cobertura mucho más amplia (Organización Internacional del Trabajo).
En Paraguay, el total de trabajadores asalariados suman 1.710.232 empleados, quienes prestan sus servicios en empresas privadas y públicas. Así, al cierre del primero trimestre de 2022 y de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), 1.364.073 personas desempeñan sus funciones en empresas privadas, lo que equivale a 39,8% de los trabajadores ocupados en el país y al 80% de los asalariados totales a esa fecha.
También, de acuerdo con datos oficiales, 346.159 personas son funcionarios públicos. La cantidad representa al 10% de los trabajadores ocupados en el país y al 20% de los asalariados totales.
Composición salarial y condiciones laborales
Al observar los datos referentes a los ingresos percibidos por los trabajadores, la información revela una clara disparidad. De acuerdo con el Observatorio Laboral del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, al cierre de 2021, un total de 355.002 personas ganaban alrededor de un salario mínimo en Paraguay. De ese grupo, 299.379 empleados prestaban sus servicios en el sector privado, 38.069 en el público y otros 17.554 eran empleados domésticos.
Aunado a lo anterior, 799.218 personas percibían menos de un salario mínimo legal en Paraguay. Cabe destacar que los trabajadores representados dentro de esta categoría se desempeñaban principalmente dentro del sector privado (567.983 personas), cierta parte en el ámbito doméstico (196.529 personas) y, en una menor proporción, en el público (34.706 personas).
Con los datos expuestos y analizados se estima que los beneficiarios directos del reajuste del salario mínimo en Paraguay sean aquellos que reciben exactamente la remuneración básica. Esto al considerar que los empleadores que remuneran por debajo del mínimo exigido se encuentran en situación irregular y, carecen de incentivos para acompañar el reajuste salarial propuesto.
Es de recordar que el Código del Trabaja establece que el salario mínimo se paga a todos los trabajadores mayores de 18 años de edad por la labor realizada durante las horas de trabajo legales. En tanto que los salarios de los aprendices y personas con discapacidad física y/o mental pueden ser inferiores al salario mínimo legal.
Finalmente, ¿cuántas personas serán beneficiadas con el reajuste?
Tras desagregar la composición salarial en el país y en base a lo expuesto, 355.000 personas serían las directamente beneficiadas con el aumento del salario mínimo legal de G. 2.550.307. No obstante, es válido señalar que el referido monto podría sufrir alteraciones al incorporar otras variables de análisis como la informalidad existente y los regímenes especiales de trabajo.
De acuerdo con datos del INE, el promedio nacional de ingresos en 2021 se situó en alrededor de G. 2.455.900 mensuales. El salario promedio de los trabajadores privados fue de G. 2.533.600 mensuales, frente a un promedio de G. 4.046.300 de los funcionarios públicos.
Con respecto a las subas salariales, los datos oficiales revelaron que los empleados privados obtuvieron en el 2021 un incremento de 7,7% (G. 181.100) de sus ingresos mensuales promedio con respecto al 2020. Por su parte, el salario de los funcionarios públicos había aumentado, en promedio, poco más de 1% durante el 2021 (G. 40.300).
Es importante señalar que, en términos agregados, 6 de cada 10 trabajadores asalariados ganaba igual o menos que un salario mínimo en Paraguay (59,6%) al cierre de 2021. Con esto, solamente 4 de cada 10 empleados percibieron más que el piso salarial en ese año.
Datos del Observatorio Laboral del MTESS revelan que los trabajadores con ingreso igual o inferior a un salario mínimo eran, en mayor proporción, los empleados domésticos, seguido de las personas que laboraban en el sector privado.
Además, se evidencia que el 41,5% de los trabajadores del sector privado ganaba menos de un salario mínimo legal en el 2021 (correspondiente a 567.983 personas). En tanto que, el 21,9% de los asalariados privados (299.379 personas) percibía exactamente igual a la remuneración básica, mientras que el 29,5% del total de trabajadores (403.306 personas) ganaba entre uno y dos salarios mínimos.
En línea con lo expuesto anteriormente, es de notarse que el 92,9% de los asalariados privados percibió hasta en 2021 lo equivalente a 2 salarios mínimos. Así, la proporción de trabajadores privados que ganaba 2 o más fue de apenas 7,1% en ese año.
Un dato no menor constituye el hecho de que el salario promedio de los trabajadores formales sea superior al de los informales en el último año. En suma, el 59,6% de los trabajadores informales privados ganaba menos de la considerada remuneración básica en el 2021 y alrededor del 31,1% percibía exactamente 1 salario mínimo en ese mismo período. En tanto que solamente el 22,6% de los empleados privados informales llegó a percibir más del mínimo salarial obligatorio.
Datos del Instituto Nacional de Estadística al cierre de 2021 muestran que la informalidad laboral en el sector privado se ubicó en 61,5% frente al 21,6% del público.
Con todo lo expuesto anteriormente es de reconocer la importancia de una herramienta como la garantía del salario mínimo para buscar resguardar el nivel de la calidad vida de los trabajadores. Sin embargo, el impacto es limitado al considerar la alta informalidad y el desincentivo que recae sobre todo en las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) que son aproximadamente el 90% de las que operan en el país y que emplean al 70% de la fuerza de trabajo. Por tanto, es urgente colocar en línea de debate de las políticas públicas el aumento de la formalización laboral como un aliado estratégico en el incremento de los ingresos y el poder de compra de las familias paraguayas.