Cargando...
El foro contó con la participación de Fredes Montes, especialista senior sector financiero del Banco Mundial; Gema Sacristán, directora general de Negocio y miembro del Comité de Dirección del BID; y Adriana Insaurralde, representante residente Conosur de Fundación Capital. La iniciativa pretende generar un debate sobre el rol de la mujer desde una perspectiva internacional, regional y local. Asimismo, ofrecer informaciones sobre las ventajas de las capacidades, habilidades y comportamientos de las mujeres en materia económica y financiera. Más aún, convertirse en un espacio que impulse el diseño y uso de productos orientados para mujeres y así fortalecer su acceso al sistema financiero formal.
María Fernanda Carrón, miembro titular del Directorio del BCP, destacó que el acceso equitativo a los servicios financieros es una prioridad para la banca matriz, además de ser una condición para la seguridad y prosperidad económica. Mencionó que, en las economías en desarrollo, aún persisten barreras que les impiden a las mujeres acceder a productos y servicios de las entidades financieras. Acotó que la desigualdad de género no es solo problema moral y social inaceptable, sino también un desafío económico crítico. “Si las mujeres no alcanzan su pleno potencial económico, la economía se verá afectada”, enfatizó.
Fredes Montes, por su parte, habló sobre la forma en que la integración de la mujer a servicios financieros digitales son promovedores de una mayor inclusión financiera. Explicó que, por ejemplo, la apertura de una cuenta tiene un valor instrumental para la mujer, pues le otorga independencia financiera y le permite ser visualizada. A la vez, tiene un valor intrínseco porque le da empoderamiento y contribuye a reducir la pobreza y a crear empresas.
A su vez, Gema Sacristán expuso sobre la “Inversión con lentes de género” y la oportunidad que ésta implica para la inclusión financiera de la mujer. La inversión “con lentes de género” se enfoca en cómo generar rentabilidad, al mismo tiempo que promueve la igualdad de género. Consiste en invertir en empresas que: son lideradas por mujeres, incorporan políticas de igualdad de género, y generan productos y servicios para mujeres. “Estamos ante una oportunidad única para reconstruir nuestras economías de una forma más sostenible e inclusiva, que no deje a nadie fuera. Cerrando la brecha de género e invirtiendo con lentes de género nos conduciremos a una sociedad más inclusiva”, aseveró. Finalmente, Adriana Insaurralde comentó acerca de la relevancia de que las mujeres gocen de la salud financiera. “Para alcanzar la salud financiera es importante enfocarse en potenciar las capacidades financieras de las mujeres, incentivar el uso de productos financieros adecuados y fomentar el liderazgo femenino en emprendimientos”, puntualizó.
Barrera
En economías en desarrollo, aún persisten barreras que impiden a las mujeres acceder a los productos y servicios de las entidades financieras.