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En los Estados Unidos, las estadísticas del Departamento del Trabajo se presentan alentadoras. Si bien la tasa de desempleo en octubre se redujo a 4,6% luego de que en setiembre se ubicara en 4,8%, el nivel aún se encuentra por encima de los registrado en la prepandemia (3,5%).
A nivel regional, el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) reportó un leve descenso en el trimestre de mayo a agosto. Así, la tasa de desocupados pasó de 13,7% registrado durante el trimestre móvil anterior a 13,2% en el último informe de empleo. A decir, de 14,1 millones de personas desempleadas en Brasil, la cantidad se redujo a 13,7 millones.
En Argentina, el desempleo mostró también una caída en el segundo trimestre de este 2021. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) precisó que la tasa se ubicó en 9,6%, lo que representó una disminución de 0,6 puntos porcentuales (pp) con relación al primer trimestre y 3,5 puntos a la registrada en igual período de 2020. Con este resultado, el indicador lleva cuatro trimestres consecutivos en retroceso, tras alcanzar el máximo anual de 13,1% registrado en el segundo trimestre del año pasado.
En Paraguay
En Paraguay, el Instituto Nacional de Estadística (INE) presentó, recientemente, los principales resultados de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC), correspondiente a los meses de julio, agosto y setiembre o tercer trimestre (3°T) de 2021.
Los datos muestran una clara recuperación de la Fuerza de Trabajo (FT) en el país con respecto al mismo periodo de 2020. El hecho se tradujo en un crecimiento de 0,7 puntos porcentuales o 104.000 personas de 15 y más años de edad, que en los siete días anteriores a la jornada de la entrevista realizaron alguna actividad económica por lo menos por una hora (población ocupada) y por las que no trabajaron ni una hora en una tarea económica, estaban disponibles para trabajar y buscaron activamente trabajo (población desocupada).
En el país un total de 3.718.022 personas (71,4%) han formado parte de la fuerza de trabajo entre los meses de julio, agosto y setiembre. En tanto que si los resultados se comparan con el segundo trimestre (2°T) también de este año, se observa una disminución de aproximadamente 0,6 puntos porcentuales o 12.000 personas fuera del citado grupo. Este comportamiento se explica, principalmente, por una reducción de la tasa de la fuerza de trabajo en las áreas rurales donde las mujeres se destacan por una mayor salida, tanto en esta zona como en la urbana.
Con respecto a la población ocupada (PO) en el tercer trimestre, los datos del INE muestran una recuperación que incluso supera a los niveles registrados en la prepandemia. Entre los meses de julio, agosto y septiembre, en el país existían 3.475.116 trabajadores (59% hombres y 41% mujeres), lo que significó un aumento de 1,8 puntos porcentuales o 156.195 personas más empleadas con respecto al mismo periodo, pero de 2020. Así, el crecimiento de la población ocupada, que pasó de 64,9% a 66,7%, estuvo fuertemente incidido por el aumento del empleo observado en las áreas urbanas (96% de la población ocupada) y el restante (4%) en las zonas rurales. Para ambos casos, los hombres figuran como los más contratados.
Además, el comportamiento es similar al comparar con los datos del segundo trimestre de este año, periodo en el cual se registró un incremento de 1,2 puntos porcentuales movido, principalmente, por el aumento en el área urbana donde la tasa de ocupación pasó de 64,5% a 65,7%. Esto es, 51.720 nuevas personas, mayormente hombres, que se insertaron al mercado laboral.
Subempleo y desocupación: ¿Qué revelan los indicadores?
Los resultados obtenidos y procesados para el indicador del subempleo muestran una reducción, tanto al comparar de manera interanual e intertrimestral.
Es de recordar que, dentro de la población ocupada, se considera a una población denominada “subocupada por insuficiencia de tiempo de trabajo” y forma parte de lo que se denomina “subutilización de la fuerza de trabajo”. Se refiere a las personas ocupadas que en una semana trabajaron menos de 30 horas, estuvieron disponibles para trabajar más horas, pero no lo hicieron por no conseguirlo (Instituto Nacional de Estadística).
En el tercer trimestre de este año se registró una importante reducción de personas en condición de subocupados, que pasó de 9,2% verificado en el tercer trimestre de 2020 a 5,4%, entre los meses de julio, agosto y setiembre de este año. Y también una disminución de 2,5 puntos porcentuales al comparar con el segundo trimestre del presente año. De esta manera, la subocupación por insuficiencia de tiempo de trabajo afectó a 179.498 ocupados en el tercer trimestre de 2021 y con mayor fuerza, nuevamente, en el grupo de las mujeres (60%) frente al resultado que arrojó en los varones (40%). El mayor pico de subocupados se había registrado en el tercer trimestre de 2020, cuando alcanzó a 301.488 trabajadores.
La tasa de desempleo fue otro indicador que mostró un importante comportamiento en el tercer trimestre de 2021. De un total de 242.906 personas que no realizó actividad económica alguna, ni siquiera por una hora en el periodo de referencia, está disponible y busca activamente empleo, 119.273 fueron hombres (49%) y 123.633 mujeres (51%), lo que sigue mostrando la mayor afectación en las mujeres trabajadoras, a pesar de que fueron las que más salieron de la condición de desocupadas (48.530) frente a los 3.261 hombres.
Al comparar los datos de manera interanual se observa una reducción de 51.791 desempleados durante julio, agosto y setiembre de este año, principalmente en las áreas urbanas (55.470 personas). Así, la tasa de desocupación pasó de 8,2% (294.697 total país) en el tercer trimestre de 2020 a 6,5% (242.906 personas) en el último reporte de 2021.
Este comportamiento es similar al comparar los datos de forma intertrimestral donde la diferencia entre el tercer y segundo trimestre del presente año se ubica en 76.078 menos desempleados. De este total, 22.592 hombres salieron de este grupo y 53.486 mujeres que dejaron de pertenecer al segmento de desocupados, en mayor número en las zonas rurales como en las urbanas. Es de recordar que la mayor cantidad de desempleados se había registrado en el segundo trimestre de 2021.
Actividades que impulsaron la recuperación del empleo
El sector privado ha sido el principal generador de fuente de trabajo en el tercer trimestre de 2021 al comparar con el mismo periodo, pero del año 2020. En el mencionado espacio, la población ocupada bajo la condición de empleado/obrero privado aumentó en 224.568 personas y en el intertrimestral se registraron 120.659 nuevos trabajadores.
En la categoría independiente se observa una reducción de 159.355 personas trabajadoras en el tercer trimestre con respecto al año 2020 y de 124.957 menos en el comparativo con el segundo trimestre, siendo el trabajador por cuenta propia y familiar no remunerado quienes verificaron las mayores caídas en el periodo interanual e intertrimestral.
Este comportamiento sufrió un revés importante al considerar que, en los trimestres anteriores, antes de la recuperación gradual de la economía, ambos grupos experimentaron un crecimiento exponencial como alternativa de ocupación ante la pérdida de empleo que sufrieron durante el primer año de la pandemia.
Los datos del INE muestran que tanto en las zonas urbanas y rurales más de 40.000 personas dejaron su condición de trabajador por cuenta propia durante los meses de julio, agosto y setiembre de 2021. En tanto que en las rurales se registró la mayor reducción del trabajador familiar no remunerado al comparar con el segundo trimestre de este año. Como se ha mostrado, los principales indicadores del empleo en el tercer trimestre de 2021 muestran una recuperación al compararlos con el mismo periodo del año 2020 e incluso con el trimestre anterior (abril, mayo y junio).
Sectores económicos
Antes de profundizar en los datos de los sectores económicos que impulsaron el empleo durante el último trimestre en estudio, es importante aclarar que los gráficos muestran la tendencia y el comportamiento en un promedio móvil de cuatro trimestres. Sin embargo, en números absolutos revela que el sector primario (agricultura, ganadería, caza y pesca), a diferencia de trimestres anteriores, registra una reducción en la mano de obra empleada en el tercer trimestre de este año que se acerca a los niveles de 2020. De 737.667 personas empleadas en el segundo trimestre de este 2021, la cantidad se redujo a 632.674 durante julio, agosto y setiembre. Es de remarcar que este comportamiento forma parte de la estacionalidad del sector agrícola, ya que los primeros meses de cada año es temporada de cosecha, lo que genera un gran dinamismo en toda la cadena.
En cuanto a los sectores que han impulsado la reactivación, el secundario figura como uno de los principales mediante la generación de alrededor de 51.804 nuevos empleos entre el periodo del segundo y tercer trimestre de 2021. Así como de unos 18.698 nuevos puestos de trabajo con respecto a julio, agosto y setiembre de 2020.
El sector que registra una paulatina, pero sostenida recuperación, es el vinculado al terciario como el comercio, restaurantes y hoteles, además el de los servicios comunales, sociales y personales. Es de mencionar que este grupo había sido el más afectado por las restricciones sanitarias al inicio de la pandemia en 2020 y que comenzó un cierto proceso de reversión a finales del año pasado e inicio de este 2021. Al tercer trimestre de este año emplea a 2.191.755 personas, lo que revela un crecimiento con respecto a trimestres anteriores.
Los datos del INE muestran que la cadena HORECA (hoteles, restaurantes y catering) empleó a más de 109.836 personas más entre el segundo y tercer trimestre de este año. Mientras que, al comparar con el periodo de julio, agosto y septiembre de 2020, la cantidad de nuevos trabajadores fue de 149.473. Así, durante el tercer trimestre de este 2021, en el país han sido empleadas 962.103 personas.
En actividades vinculadas con los servicios, también se observa una recuperación en el interanual 117.522 personas y una reducción en el inter trimestral de 4.212 empleados. El total de trabajadores en este sector se ubicó en 890.867 personas.
Es de destacar que la mayor recuperación interanual e intertrimestral del sector secundario se dio en el área rural con 33.578 y 13.240 nuevos empleos, respectivamente, en tanto que el terciario en los mencionados periodos de tiempo se registró en la zona urbana, 155.626 y 80.279 más puestos de trabajo.
El levantamiento de las restricciones sanitarias y educativas permitieron la liberación de mano de obra femenina, lo que dio paso a la inserción en el mercado laboral de una importante cantidad de trabajadores en los últimos meses.
Los datos generales presentados en esta edición revelan una recuperación del mercado laboral en el país con aún marcadas diferencias en el acceso y las posibilidades que tienen las mujeres trabajadoras frente a los hombres.
El segundo año de pandemia se sigue presentando con importantes desafíos para lo que resta de este 2021, por lo que la intervención pública y privada son claves para un consolidado proceso de recuperación.
En la siguiente entrega, se profundizará en la situación del empleo por género, ingresos y los indicadores de informalidad que son informaciones más que relevantes para el diseño de políticas de contención y reimpulso del empleo en el país.
Empleo
Sector secundario fue el que impulsó la reactivación con la creación de 51.804 empleos, entre el periodo del segundo y tercer trimestre 2021.
Pico
El mayor pico de los subocupados se había registrado en el tercer trimestre del año pasado, cuando alcanzó a 301.488 trabajadores.
Terciario
El sector que registra una paulatina, pero sostenida recuperación, es el vinculado al terciario como el comercio, restaurantes y hoteles.
Servicios
En las actividades vinculadas con los servicios, también se observa una recuperación en el interanual, con 117.522 personas.
Rural
La mayor recuperación interanual e intertrimestral del sector secundario se dio en el área rural, con 33.578 y 13.240 nuevos empleos, respectivamente.
Inserción
Levantamiento de las restricciones sanitarias y educativas liberaron la mano de obra femenina, que dio paso a la inserción en el mercado laboral.