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Así, la depreciación acumulada (enero a julio) asciende al 8% y 14% en relación a los últimos doce meses, con lo que sigue siendo una de las menores tasas registradas en la región, restando así competitividad de los productos nacionales contra sus principales socios comerciales.
En términos relativos comparado con otros países de la región, según datos dados a conocer por el Banco Central, Paraguay sigue teniendo una baja tasa, ya que en Brasil se acumula una apreciación del 27%, Argentina 20%, Uruguay 14%, en Colombia 10%. Todas las monedas de la región perdieron fuerza frente al dólar.
Según la citada consultora, este aumento en el tipo de cambio se debe en parte al menor ingreso de la divisa de Estados Unidos (EE.UU.) al país, principalmente como consecuencia de la caída de las exportaciones, las cuales, al mes de junio eran 19,6% menores a las del mismo periodo de 2019, destacándose la baja en la exportación de energía eléctrica, así como de algunos productos agropecuarios como maíz y trigo, los cuales son de gran incidencia en el total.
La baja de exportaciones representa una merma de US$ 1.245 millones, dinero que dejó de ingresar al país hasta el sexto mes del año.
Así también, la crisis ha afectado económicamente a todo el mundo, generando menores ingresos para los paraguayos residentes en el extranjero, con lo que disminuye la capacidad de envío de remesas. Hasta mayo, se registró una caída del 26% de las remesas de compatriotas, que representa en término de valores, unos US$ 59 millones menos que dejó de ingresar.
Por otra parte, la demanda de los depósitos en moneda extranjera aumentó en 12,5%, evidenciando que la incertidumbre ante la recuperación económica paraguaya ha generado que los agentes esperen señales más claras en cuanto a los planes elaborados por el Gobierno, por lo que deciden posicionarse en el dólar, el cual es considerado una moneda con mayor seguridad, restando el incentivo de llevar a cabo inversiones en la economía real.
El economista Gustavo Chamorro de la Consultora Mentu señaló que la fuerte depreciación del guaraní se debe principalmente a la tendencia creciente del dólar a nivel mundial, el cual se acentuó en los últimos días por la incertidumbre que genera la lenta recuperación de la economía paraguaya. En ese sentido, dijo que incide en la percepción, la gestión de la crisis sanitaria y económica por parte del Gobierno, ya que los agentes económicos, reiteró, aguardan señales más claras de los planes de reactivación. “Si bien el BCP monitorea el movimiento, su alcance es limitado ya que su valor se determina por mercado”, detalló el profesional.
Inyecciones en el mercado
El Banco Central del Paraguay (BCP) ha intermediado en el mercado de divisas mediante un aumento en la inyección de divisas tanto de las ventas compensatorios como intervenciones directas. Hasta finales de junio último, la banca matriz inyectó US$ 713 millones en el circuito financiero, de los cuales US$ 580 millones fueron a través de las ventas compensatorios, de las cuentas que tienen el Ministerio de Hacienda en el BCP y que se dio salida en el transcurso de este año; y US$ 133 millones fueron las intervenciones directas.
De esta manera, la citada consultora espera que la cotización del dólar se mantenga cercano a G 7.000 durante el segundo semestre del año.