86 años de la creación de la colonia Chararã

El docente, investigador e historiador de Ytapé Antonio Ramón Barreto escribe sobre la rica y poco conocida historia de la antigua colonia Chararã –actual distrito de Gral. Eugenio Alejandrino Garay, del departamento del Guairá–, que cumplió 86 años y cuya fiesta patronal se celebra el 29 de septiembre.

Plaza de Gral. Eugenio A. Garay (antiguamente, Chararã), departamento del Guairá (Foto: cortesía del autor).
Plaza de Gral. Eugenio A. Garay (antiguamente, Chararã), departamento del Guairá.gentileza

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Chararã tiene una rica historia, al igual que los dos distritos más antiguos del departamento del Guairá, Ytapé y Villa Rica. Estos tienen en común importantes circunstancias: ambos fueron fundados en otra zona, y ambos, coincidentemente, fueron trasladados a sus respectivos lugares actuales en el año 1682. En esta ocasión, hablaremos brevemente de los primeros habitantes de Chararã, actual distrito de Gral. Eugenio A. Garay, su parroquia, la creación de la colonia, su ramal ferroviario, su primera escuela, la instalación de la comisaria, pero próximamente ahondaremos estos y otros temas. Por cierto, el Santo Patrono de este distrito es San Miguel Arcángel, cuya festividad se celebra cada 29 de septiembre.

Recordemos que Chararã pertenecía al departamento de Caazapá. Este departamento también había cedido su territorio a Ytapé, fundado el 10 de marzo de 1678; Villa Rica, fundada por Ruy Díaz Melgarejo en 1570; y San Juan Nepomuceno, fundado en 1797.

Los aché-guayaquíes, primeros pobladores de Chararã, fueron atraídos por sus exuberantes recursos naturales (impenetrables bosques y arroyos), sus animales silvestres y, principalmente, por la serranía del Yvytyrusu. Sin embargo –miserablemente– fueron desalojados contra su voluntad por los madereros después de que el Estado vendió las tierras, en la década de 1910, a la Compañía Argentino-Paraguaya de Maderas Limitadas, para instalar en el lugar aserraderos a fin de explotar maderas.

Antes del establecimiento de los extranjeros y, con ellos, de los labriegos paraguayos en el distrito, otrora Paraje Chararã, y antes de conocer la marginación, esclavización y persecución, los guayaquíes vivieron de la abundancia de recursos naturales, fruto y providencia de la madre natura. Ahora están dispersos por otros distritos y departamentos, y no se registra ni una sola comunidad aché en el distrito Gral. Eugenio A. Garay.

Al poco tiempo de la venta de las tierras, que ahora pertenecen a los distritos de Fassardi, Gral. Eugenio A. Garay, Aba’i, Paso Yobái, entre otros, el Estado oficializó el proyecto del tramo ferroviario Borja-Yguazú. El propósito principal del Ferrocarril Central del Paraguay –después de la conexión de Asunción, ciudad capital de Paraguay, con Encarnación– era la conexión con Brasil para la explotación más fluida de maderas por la Compañía Argentino-Paraguaya de Maderas. El mencionado tramo fue habilitado el 5 de marzo de 1914 por el Decreto Nº 1735, con la obra parcialmente terminada, por lo cual la autoridad de turno recomendó la circulación prudencial por dicho tramo, ya que los terraplenes y balizas no tenían la solidez suficiente para soportar la marcha rápida de los trenes.

Luego de la habilitación oficial del tramo Borja hasta Potrero Chararã, el Poder Ejecutivo vio la necesidad de instalar una guarnición militar en dicho potrero para velar por la seguridad de los pobladores del lugar, porque el desarrollo vial traería –y lógicamente fue así– crecimiento económico, social y demográfico. El presidente de la República, el 24 de marzo de 1914, con el Decreto Nº 1790 creó un Pelotón de Gendarmería Montada en el paraje denominado Chararã, que corresponde a la jurisdicción del mencionado tramo ferroviario. Para tal efecto, dotó de salarios a un comandante de Pelotón, un sargento, un cabo y trece agentes. Como comandante de Pelotón fue nombrado el señor Fermín T. Coronel por medio del Decreto Nº 1802, fecha 26 de marzo de 1914.

A un año de la instalación del Pelotón de Gendarmería Montada en la zona, recién habilitado parcialmente el tramo ferroviario Borja-Yguazú, el Poder Ejecutivo creó una comisaría Policial en Chararã (departamento de Yhacaguasu) con el Decreto Nº 3334, fecha 31 de mayo de 1915, y nombró al señor Santiago Flor para asumir el cargo recién establecido.

En marzo de 1916, con el rápido aumento de la población del Paraje Chararã, el administrador de la Compañía Argentino-Paraguaya de Maderas, Crispiniano Viera Campuzano, vio la necesidad de crear una escuela en la zona. Para tal fin, los pobladores se reunieron el 1 de abril de ese año con el primer maestro y director, Agustín Sánchez, y familias que habían formado la colonia en aquel paraje. La primera casa de estudios, a raíz de la superpoblación de alumnos, funcionó en tres turnos (mañana, tarde y noche). En la década de 1960 tenía 444 alumnos matriculados desde primer hasta sexto grado. La directora actual del primer establecimiento educativo de Chararã, hoy Escuela Básica Nº 285 «Don Crispiniano Viera Campuzano», es la Lic. Saida Elena Cáceres de Riveros. En el distrito de Gral. Eugenio A. Garay se registran cerca de 1500 alumnos matriculados, distribuidos en los 22 establecimientos educativos, con 276 docentes, entre maestros de grado y catedráticos.

Para la creación de la colonia, el Estado, el 1 de julio de 1936, con el Decreto Nº 2508, procedió a la expropiación de tierras de la Compañía de Maderas mencionada, amparado por la ley expedida el 25 de junio de 1904, que autoriza al Poder Ejecutivo a «establecer colonias agrícolas y pastoriles en diversos puntos de la República, cuidando de escoger para ellas tierras adecuadas y ubicarlas con preferencia sobre las líneas férreas o costas de ríos navegables». Otras colonias también se establecieron en el distrito de Gral. Eugenio A. Garay: en 1941, Beato Roque González de Santa Cruz, con 132 lotes y 3027 hectáreas; en 1976, 11 de Septiembre, con 176 lotes y 1508 hectáreas

Con relación a la práctica religiosa en Chararã, al principio no había capilla; por ende, las celebraciones se realizaban en casas particulares. Con el transcurrir del tiempo los obrajeros de la compañía maderera decidieron construir un oratorio público. Entonces, parroquialmente esta zona pertenecía a San Juan Nepomuceno; luego pasó a depender de Yhacaguasu y Ñumí. La iglesia de Gral. Eugenio A. Garay fue oficialmente elevada a parroquia el 8 de septiembre de 1971 por Decreto Episcopal Nº 988, y como santo patrono eligieron a San Miguel Arcángel, cuya festividad se celebra cada 29 de septiembre. El primer párroco de esta iglesia fue el padre Benito Espínola, desde 1971. Según el informe de la parroquia, la imagen de San Miguel fue tras-

ladada desde Roma, donada por el señor Agustín Sánchez, y la otra imagen encontrada en la iglesia, de Cristo, tallada en madera, es obra de la escultora María Cristaldo de Britos, donada por la familia Aquino-Ferreira, Gregorio y Crescencia.

El 23 de junio de 1955, por Ley Nº 260, se crearon varias municipalidades, que corresponden a la tercera categoría; entre estas se encuentran Gral. Eugenio A. Garay, Ñumí, Independencia, Buena Vista, Capitán Meza, Dr. Cecilio Báez, Dr. Moisés Bertoni, Gral. Delgado, Nueva Colombia, Nueva Germania, 1º de Marzo, San Lázaro, Obligado y Antequera.

barreto26antonio@gmail.com

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