Fiesta patronal diferente, pero con más fe y amor al prójimo

Una atípica fiesta patronal vive la diócesis de San Lorenzo, atendiendo las medidas restrictivas por el covid-19. Sin embargo, más que nunca la fe y el amor al prójimo están a prueba, porque cuidarnos entre todos es profesar solidaridad y hacer el bien común, destacó monseñor Joaquín Robledo.

La pandemia  por el coronavirus obligó a reducir este año la presencia de devotos en las celebraciones eucarísticas.
La pandemia por el coronavirus obligó a reducir este año la presencia de devotos en las celebraciones eucarísticas.

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SAN LORENZO (Antonia Delvalle C., corresponsal). El obispo diocesano, monseñor Joaquín Robledo, señaló que este año las celebraciones se centran en la “Palabra de Dios” y el lema fue: “Nos ardía el corazón... cuando nos explicaba las Escrituras (cf. Lucas 24, 32)”.

La misa principal será celebrada hoy a las 08:00 y estará presidida por monseñor Joaquín Robledo. Luego se realizará la procesión de la sagrada imagen alrededor de la catedral.

Otra misa se prevé a las 10:00, a cargo del presbítero Jorge Sotelo. La misa de clausura será a las 18:30 y estará presidida por monseñor Digno Benítez, párroco de la Catedral de San Lorenzo.

La diócesis celebró el 9 de julio 20 años de su creación por Juan Pablo II en el marco del Año Jubilar 2000.

Por el protocolo sanitario, para paliar la propagación del nuevo coronavirus, la asistencia de fieles fue limitada durante el novenario, pero pudieron participar en forma virtual desde sus hogares mediante la transmisión por Facebook Live de la cuenta del Obispado de San Lorenzo. Las radios Sembrador FM (88.7) y María (107.3 FM) también publicaron en vivo.

A las 17:30 hubo rezo del Santo Rosario y a las 18:30 la misa del novenario.

Monseñor Robledo dijo que la emergencia por el covid-19 también tiene su aspecto positivo, ya que reune y une al núcleo familiar en torno a la oración y permite recuperar el hábito de rezar en la casa que se venía perdiendo.

Señaló que las oraciones al santo patrono de la diócesis y de la ciudad son para que interceda por populosa comunidad diocesana, y en general por Paraguay y el mundo, para vencer al mal del nuevo coronavirus que acecha.

“Debemos cuidarnos y cuidar a los demás, como una manera de solidarizarnos con nuestros hermanos, sobre todo porque el covid-19 es un enemigo global. Tenemos en cuenta la caridad con el prójimo para no contagiarnos nosotros y contagiarle, que es una forma de manifestar el amor, de procurar el bien de la comunidad”, resaltó.

Instó a tomar en serio las recomendaciones del Ministerio de Salud, y llevarlos a la práctica, para que todos tengamos salud, paz y vida. Acotó el que covid-19 es un enemigo común, invisible y silencioso que juntos vamos a vencer practicando los cuidados y la solidaridad.

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