Cargando...
Este año se cumple el 50º aniversario de la firma y puesta en vigencia del Tratado de Itaipú, lo que representa una nueva oportunidad para negociar mejores condiciones para el Paraguay, según destaca el presidente de la UIP, Ing. Enrique Duarte.
“El Día Nacional de la Industria no es solo una celebración de nuestros logros, sino también un llamado a la reflexión sobre los desafíos que aún enfrentamos”, afirma.
En tal sentido, menciona que la fecha es una invitación para considerar la importancia de un modelo de industrialización para el país, que “no solo ofrezca oportunidades a los jóvenes que se incorporan al mercado laboral, sino que también reconozca y valore la experiencia y el saber de aquellos que han dedicado años al oficio, y que garantice una jubilación digna al final del recorrido laboral”, sostiene.
En ese contexto, el vocero del sector, que representa el 27% del producto interno bruto (PIB), puntualiza que “es esencial impulsar este modelo mediante políticas públicas efectivas, creando un entorno propicio para atraer inversiones y fomentando una participación ciudadana activa y comprometida”.
Añade que esos planes deben ir de la mano con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), pues “el desarrollo sostenible no es solo un derecho, sino también una responsabilidad que todos compartimos”. Al perseguir dichos objetivos, es esencial respetar las normas, optar por la formalidad y colaborar en conjunto. “Son elementos clave para avanzar. Es un camino que debemos recorrer juntos, como ciudadanos, productores e industriales, bajo el sello distintivo de ‘Hecho en Paraguay’”, resalta Duarte.
“La transformación que en el pasado supuso Itaipú para nuestro país es un imperativo que en el presente nos convoca a generar constantemente nuevas posibilidades de progreso para el Paraguay”, añade y precisamente en los 50 años de la firma del Tratado de Itaipú Binacional, nos encontramos en un momento histórico en el que nuestro país puede lograr el pago del precio justo por la energía cedida al Brasil, así como la atracción de inversiones que permitan que a nivel local utilicemos nuestra energía. Esa posibilidad de aprovechamiento, precisamente, se dio gracias a la inversión en infraestructura en la que industriales paraguayos tuvieron protagónica participación.
Finalmente, el titular de la UIP brinda un profundo y sincero reconocimiento y admiración a todos aquellos industriales que, con el amanecer, abren las puertas de sus empresas. Con su esfuerzo y dedicación diarios, no solo transforman materias primas, sino también realidades, creando oportunidades para sí mismos, sus familias, sus equipos y, en el proceso, contribuyendo al engrandecimiento de Paraguay.