Cargando...
Para el cierre de este año 2020 se proyecta una retracción en el desempeño del sector industrial manufacturero en alrededor del 3,5%, por efectos de la pandemia. De esta forma se completarán dos años consecutivos de recesión, con expectativa del ansiado repunte para el 2021. Cabe mencionar que la industria manufacturera tiene una participación de alrededor del 20% en la generación del producto interno bruto (PIB) del país, mientras que el sector secundario en su conjunto, que incluye además a las construcciones, electricidad y agua, representa casi el 32,4% del PIB.
La fuerte caída que sufrieron los ingresos de las familias paraguayas, que se traduce en un menor consumo en los hogares a causa de las medidas sanitarias por la pandemia del covid, incidió principalmente en la fuerte reducción de la demanda interna. No obstante, flagelos como el contrabando, la corrupción y la excesiva burocracia completaron el combo que afectó de manera importante el normal desempeño del sector industrial.
Pese al difícil año económico, las industrias mostraron resistencia y combatieron la crisis con innovación y eficiencia; con la expectativa anclada en el 2021, año considerado de la reactivación o recuperación.
Cabe señalar que para este año, la estimación oficial es de una retracción del 3,5% en el producto interno bruto (PIB), aunque algunas consultoras privadas sostienen que podríamos cerrar incluso con una caída del 5%, lo que resultará en la peor recesión del siglo, en tanto se proyecta un repunte del 4,5% para el 2021.
Economía global en shock
El analista Stan Cannova explica que la realidad es que la economía global está en shock y no es muy certero cuándo volveríamos a la normalidad. Menciona que hay miles de empresas en quiebra, otras miles en convocatoria de acreedores, millones de desempleados a nivel mundial y quienes aún tienen la suerte de tener un trabajo están con la preocupación de si es que van a seguir. Pero también desde el otro lado del espectro hay industrias que han crecido de manera exponencial, como la farmacéutica, la fitosanitaria, telecomunicaciones, electrónica, software, en pos a la nueva forma covid de vivir.
En lo que se refiere a la industria en el Paraguay, detalla que es uno de las principales componentes del PIB y una de las piedras angulares de la economía. “Lo que queda al Paraguay como estrategia es fomentar la llegada de la inversión extranjera directa (IED), inculcar el posicionamiento de industrias en mercados internacionales y buscar nuevos modelos de financiamiento a mediano y largo plazo”, afirmó.
Incentivos
Nuestro país se ha destacado a lo largo de estos años por sus ventajas comparativas para la apertura de industrias, como la escala del régimen impositivo 10/10/10 para impuesto al valor agregado (IVA), impuesto a la renta comercial e impuesto a la renta (IRP), muy por debajo del régimen de los vecinos. También hay arancel cero por importación de bienes de capital como maquinarias y equipos, dentro y fuera del país, entre otros beneficios atribuidos en la Ley N° 60/90.
La percepción de una estabilidad económica, baja inflación, ley de responsabilidad fiscal (LRF), normativa que aprueba la asociación público-privada, entre otras legislaciones que garantizan la inversión privada hacen propicio el ambiente para el crecimiento sólido de las industrias en el país.
Desafíos
Entre los desafíos para apuntalar la reactivación del sector, el analista Stan Cannova sugiere la creación de un Fogapy para importadores y exportadores, además de suprimir cuestiones como la doble imposición tributaria, evitar la retención de envíos de divisas, proponer tratados de libre comercio donde se dejen de lado los aranceles y las barreras no arancelarias, y se busque agilizar los procesos de los bancos.
Además, la industria no es solamente lo físico tangible, sino también lo intangible, como la industria del software que tiene problemas a la hora de facturar sus servicios en otros países por cuestiones impositivas recíprocas y de retenciones que no son muy favorables para quienes necesiten consumir nuestros productos. “El Gobierno debe ser el que lidere iniciativas de mejora para estos sectores”, indicó.
La IED es un aliado importante de la industria donde empresas pueden obtener socios estratégicos; lastimosamente los inversionistas todavía tropiezan con algunos problemas o trabas que finalmente dilatan oportunidades de negocios para el país.