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VILLARRICA (Antonio Caballero, corresponsal). Marcos Zeida Golber falleció el pasado 25 de enero en la ciudad de Maldonado, Uruguay. La urna que contiene sus restos fue traída por sus sobrinos María Rosa y Alejandro Vargas Zeida.
Los mismos cumplieron el deseo del extinto, de que sus cenizas descansen en Villarrica, donde llegó con su familia en el año 1924.
El político era oriundo de Villa Domínguez de Entre Ríos, Argentina. Culminó sus estudios secundarios en Asunción, con medalla de oro, y jugó fútbol en el club Pe-
ttirossi.
Después de la revolución del 47, con la victoria de los colorados, Marcos Zeida fue al exilio a Argentina y luego pasó a Maldonado, Uruguay, donde trabajó en las barracas.
Después de la caída de la dictadura de Alfredo Stroessner volvió al Paraguay, pero tuvo que regresar a Maldonado, Uruguay, por recomendación médica, pero su deseo fue siempre que sus cenizas sean esparcidas en una plaza de esta ciudad.
Sin embargo, en Villarrica no existe una ordenanza que permita utilizar la plaza para depositar las cenizas de un héroe. Entonces, por la resolución municipal se autorizó que sean ubicadas en el mausoleo de los héroes del Chaco de la ciudad.
El acto fue realizado con la presencia del general retirado Víctor Segovia, un amigo de Marcos Zeida en los últimos años de su vida, y autoridades municipales de la capital guaireña.