Pequeñas industrias de almidón producen 300.000 kilos mensuales

Unas 35 fábricas familiares de la localidad de Cerro Punta, del distrito de Mauricio José Troche, producen 300.000 kilos de almidón por mes. Según los pobladores, unas 1.000 personas trabajan en forma directa, además están los que producen la mandioca y los fleteros.

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MAURICIO JOSÉ TROCHE, Dpto. del Guairá (Alberto Guido Pérez, corresponsal). En esta localidad hay unas 35 pequeñas empresas que se dedican al rubro del almidón. El método de producción es totalmente artesanal, porque es la forma que piden los fabricantes de chipa.

La mayor cantidad del producto obtenido es comercializado en Eusebio Ayala, Caacupé, Ciudad del Este, Mercado 4 y Abasto.

El precio va desde G. 2.000 hasta G. 2.500 por cada kilo, dependiendo de la calidad del producto. De una tonelada de mandioca se obtiene un promedio de 200 a 220 kilos de almidón.

Proceso de fabricación

Para la fabricación del almidón se deposita la mandioca al lado de una especie de batea que tiene un eje con varios brazos. Luego un motor impulsa el giro del eje, y se mantiene un chorro de agua constante hasta que quede limpia la mandioca. De allí pasa por el molino de donde sale triturada la materia prima. El siguiente paso es cargar en otro torno similar, pero más chico, también requiere de mucha agua, al girar centrifuga el producto y sale el zumo de la mandioca.

En tanto, el typyraty (bagazo) queda en el torno y el resto cae en una pileta en donde queda por un tiempo hasta que esté bien asentado. De allí, ya convertido en almidón, es alzado al secadero y depende del estado del tiempo para que esté seco. Una vez bien seco, se pasa por un molino, de ahí a una batea para luego envasar y esperar al cliente.

En cada unidad fabril se involucra primero a toda la familia y luego a los vecinos. Al respecto, Clemente Bruno, productor de almidón pionero en la zona, dijo que el trabajo, pese a las limitaciones, es de primera calidad. “Nuestro producto es de primera calidad, pero necesitamos mejorar nuestro precio y para ello tenemos que utilizar tecnología. Prácticamente seguimos la forma que hacían nuestros abuelos. Necesitamos más ayuda crediticia para mejorar”, dijo Bruno.

El sistema de secado que se está empleando tiene que mejorar, sobre todo en invierno, indicó el productor.

“Para nosotros hacer almidón es un trabajo muy noble y pedimos que la gente del Estado se nos acerque. Muchas veces fuimos junto a las autoridades y no nos hacen caso”, se quejó Bruno.

El 50 por ciento de la mandioca utilizada en las pequeñas fábricas se produce en Cerro Punta, el resto proviene de las comunidades aledañas.

En tanto, del subproducto de la mandioca, el typyraty, se hace mbeju y otras delicias que siempre acompañan la mesa del paraguayo.

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