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EUSEBIO AYALA (Patricia Meza, corresponsal). El joven Diego Diarte (20) nació en la ciudad de Isla Pucú, pero sus raíces son barrereñas, según comentó. El artista expresó que su amor por el arte es único porque empezó a crear sus primeras obras desde muy adolescente.
Señaló que ahora tuvo la idea de presentar por primera vez su colección de pinturas sobre piedras. La presentación de los trabajos se realizó en la posada Barrereña de esta ciudad el pasado jueves al finalizar el chipa rape.
“Ko’êju y Kuarahy reikévo” se denomina la colección de pinturas basadas en actividades cotidianas que realiza la mujer paraguaya tanto al amanecer como el atardecer, indicó. Dijo que también tiene temas relacionados al tradicional chipa apo.
El joven expresó que las pinturas son a base de temperas y pigmentos artesanales. “Con este trabajo quiero mostrar y dignificar el trabajo de la mujer paraguaya”, expresó.
Retablo de semillas
Diego Diarte expresó que considera como una de sus obras maestras al retablo de 4 x 3 metros, cubierto por más de 97 kilos de semillas de 19 tipos. Los frutos pegados a mano fue una inspiración del retablo hecho por el artista Koki Ruiz para la venida del papa Francisco.
Comentó que esta obra es actualmente el altar en el cual posa la Virgen de los Milagros de Caacupé y puede ser observada en la basílica menor del santuario de Caacupé.
Los precios de sus pinturas oscilan entre los G. 120.000 y 170.000 dependiendo del tamaño, también realiza trabajos personalizados. Sus obras se pueden encontrar en la red social Facebook con el nombre Diego Martín Diarte Añazco, ya que no cuenta con un sitio permanente de exposición.