El horqueteño que descubrió su talento en otra ciudad

HORQUETA (Freddy Rojas Martínez, corresponsal). Un ciudadano oriundo de esta comunidad descubrió y potenció su talento de escultor de imágenes en otro punto del país y luego retornó a Horqueta, donde desde el 2002 esculpe todo tipo de figuras.

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Se trata de Ramón Moráez, de 63 años, quien dibujaba de niño, según recuerda. Relató que a los 14 años tuvo que trasladarse a la capital del país para cumplir su servicio militar obligatorio, y tras salir del cuartel trabajó por muchos años en la zona de Pedro Juan Caballero y en Brasil. Era topadorista y carpintero.

En 1979 se casó con Felicia Candia, y 1996 se asentaron juntos en la localidad de J. Augusto Saldívar, departamento Central. La pareja tuvo cuatro hijos: dos varones y dos mujeres, ahora ya mayores de edad.

El artista Moráez cuenta que a finales de la década del 90 pudo descubrir su talento al empezar a esculpir las primeras imágenes. Con el correr de los años, se fue afianzando como escultor.

Reconoció que influyó el trabajo que realizaba en Pedro Juan Caballero en un carpintería, pues allí esculpía adornos en muebles de madera, como terminación del producto.

El artista hace imágenes de madera, de cemento portland y cemento blanco, de acuerdo al pedido de las personas interesadas.

En Horqueta esculpió la estatua del recordado educador Félix Aldunate Castillo, y se instaló en el Centro Parroquial de Educación de los Hermanos Maristas, en la esquina de la calle Virgen del Rosario y la arteria que lleva el nombre de referido educador marista.

También preparó las imágenes del personaje “Claudio el Chicano”, que fueron colocadas frente al polidepotivo municipal, como también algunas figuras de animales, en el paseo denominado “Animalia”.

Actualmente, trabaja en una imagen de Jesús Misericordioso, que es para su hogar.

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