Cargando...
SAN PEDRO DE YCUAMANDYYÚ (Omar Acosta, corresponsal). El deterioro de la Ruta XI Juana María de Lara va en aumento, favorecido por la total desidia del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Representa un verdadero peligro para el tránsito automotor.
Se trata de un tramo muy utilizado por transportadores de granos que acercan la producción hasta Puerto Antequera, pero que al no existir ningún control serio transitan con sobrepeso, destruyendo la vía a su paso. Una buena reparación es urgente, así como la instalación de una báscula de control de peso y vías alternativas para camiones de carga.
El tramo que conecta a San Pedro de Ycuamandyyú con Nueva Germania presenta varios y serios deterioros que van en aumento. Así también el tramo que une la capital departamental con Puerto Antequera, donde las banquinas prácticamente “desaparecieron”. Igualmente, la avenida Florentín Almirón de la capital departamental se destruyó por completo ante la carencia de vías alternativas para los camiones pesados.
En Puerto Antequera operan dos silos privados que reciben a diario centenares de camiones pesados. Estos vehículos, al no contar con vías alternativas, circulan por el centro de la ciudad, causando peligro a la ciudadanía, copando el casco céntrico de las ciudades.
Las comunas de Puerto Antequera y San Pedro de Ycuamandyyú claman por vías alternativas para los vehículos pesados y solicitan la instalación de una báscula para el control de peso. Incluso el intendente de la capital departamental, Juan Carlos Rodríguez (ANR), había enripiado la semana pasada el asfaltado en señal de protesta.
Empresarios
La irresponsabilidad de los empresarios –dueños de silos– está a la orden del día, pues no cuentan con lugares para estacionamientos de los camiones, que copan la ruta y las ciudades esperando turnos para descargar. Esta situación se da con la complicidad o la incapacidad de los municipios para exigir estacionamiento a los empresarios.
En tanto que desde Obras Públicas en el gobierno anterior solo se limitaron a enviar básculas móviles esporádicamente y realizaron bacheos que en poco tiempo se volvían a deteriorar.
El actual gobierno, al menos desde la jefatura departamental, promete desde esta semana comenzar, cuando el clima permita, los bacheos.