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CAACUPÉ, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). Los espacios “loteados” por la Comuna local, administrada por el intendente liberal Diego Riveros, a los vendedores ambulantes para las próximas festividades de la Virgen de Caacupé, están ubicados en plena calle Dr. Venancio Pino. Cada sitio mide 1,5 metros de ancho y tiene un costo de G. 350 mil.
Varios vendedores compraron los espacios por la proximidad a la Basílica y poder tener buenas ventas. Sin embargo, la calle está minada de baches y aguas servidas, convirtiéndola en una zona insalubre, sucia e inservible para los negocios, según se quejaron los comerciantes.
Algunos frentistas que cuentan con negocios sobre la calles todo el año y pagan sus impuestos también lamentaron que a ellos no se les permita sacar sus mercaderías a las veredas por ser una zona sacra. Pero, ahora sí se permite que las calles sean ocupadas por vendedores de diferentes productos y rubros.
Zona prohibida
La Municipalidad empezó con el “loteamiento” hace unas semanas de varias calles y veredas para los vendedores ambulantes en las cercanías del santuario mariano. Sin embargo, infringió una ordenanza del año 1993 que declara zona sacra el santuario y todas las calles de su entorno. Además se prohibe la presencia de vendedores ambulantes.
Por su parte, el jefe comunal manifestó que se promulgó una ordenanza especial para que se puedan colocar vendedores ambulantes en la zona delimitada. Dijo que los espacios “alquilados” no obstaculizan el paso de ambulancias. Agregó que en los próximos días se realizará el bacheo de la zona.