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Shirley de Pavetti, adiestradora, señala que las razas ideales como guardianes son el pastor alemán, el chow chow y el rottweiler.
Aconseja que en los primeros cinco meses de vida del cachorro socialice con las personas y perros, y además que esté expuesto a todo tipo de distracciones, como ruidos de vehículos.
La adiestradora explica que cada proceso deberá llevarse a cabo en forma gradual, para no asustarlo.
“Diferentes situaciones le facilitarán su adaptación; lo logrará cuando lo saca a pasear de día como de noche. Allí su mascota observará los movimientos de las personas, el ruido de las motos, autos, etc.”.
La experta destaca que a los seis meses el animal ya deberá aprender a obedecer los llamados básicos, como sentarse, caminar al lado del dueño, pararse, entre otros. “A los siete meses se entrenará al guardián, que tendrá contacto solo con los integrantes de la familia, pues si lo hace con cualquier otra persona ya no sabrá diferenciar quién forma parte de la familia y quién no”, resalta.
“A los siete meses, el adiestrador conocerá las reacciones del perro: cuando se acerca a la reja de la casa notará si solo lo mira o ladra sin parar a fin de avisar a los dueños que algo extraño está cerca”, indica.
“El pastor alemán es adulto a los dos años, tiempo en que adquiere un carácter fuerte. Lo ideal es entrenarlo en forma constante a través de sencillos procedimientos, como correr, tentarlo y proveer trapos que el animal pueda morder”, finaliza.