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El Arq. Mauricio Giménez diseñó una galería y optó por una pérgola de hierro sobre el cual crece una trepadora. La finalidad es que en poco tiempo esta planta provea el aislamiento natural de las hojas y así la sabia naturaleza se incorpore a la moderna arquitectura.
Señala que las pérgolas pueden ser de madera o de hierro y las hileras necesarias dependerán del área que se desea cubrir, mientras más altura tenga la pérgola será mejor, ya que el aire tendrá una buena circulación. Unas enredaderas servirán para el efecto, así como toldos que cubran el espacio existente entre las hileras horizontales.
La Ing. Agr. Mirtha Montiel aconseja no ubicar la pérgola tan próxima a la piscina, ya que las hojas que caen de la planta pueden interferir en el mantenimiento. Es ideal para patios grandes, pues brinda altura al sector.
“Las trepadoras aconsejables son la thunbergia que posee flores lilas azuladas y son de rápido crecimiento, así también el jazmín paraguay de flores perfumadas. Se encuentra también la allamanda con flores en distintos tonos y se caracterizan también por ser de rápido crecimiento”, añade.
Recuerde que un buen barnizado en las maderas de la pérgola protegerá el material contra la humedad y las perjudiciales termitas.
Considere esta posibilidad si necesita mayor espacio cubierto en el jardín.