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Hugo Martino, del acuario El pecewito, afirma que “el cuidado de los peces de un acuario se basa en dos puntos principales, que consisten en alimentarles dos veces al día con balanceados elaborados para peces, y un cambio parcial de agua, que se realizará cada 15 días”.
La observación diaria es importante a fin de corroborar cómo se encuentren nuestros peces, en relación a sus aspectos y comportamientos. “Es recomendable verificar la calidad del agua, en transparencia y olor”, indica.
Comenta que “hay peceras que requieren como mínimo cinco peces, mientras que otras solo necesitan un pez. Una pecera genera varios beneficios, transmite movimiento, elimina las cargas negativas del día y aporta tranquilidad a quien la observe”.
“Incluso, en ocasiones al observar el acuario, a través del movimiento del agua, de las plantas que se encuentran en el interior, así como la actividad constante de los peces, hace olvidar a la persona sus problemas, esto se produce en forma natural gracias a la sabiduría de la naturaleza”, señala.
Recuerde que así como otras mascotas, los peces también necesitan cuidados básicos, como “ubicarlos en una pecera de buen tamaño en relación a la cantidad y tipo de peces, para ello deberá consultar con el profesional. Otro punto fundamental es la ubicación de la pecera, en lo posible que tenga buena iluminación y donde no haya mucha corriente de aire”.
Ante cualquier duda con respecto al cuidado de estos animales, debe asesorarse con un profesional en el tema, quien le aconsejará sobre los peces compatibles, la cantidad, y los cuidados que requieren, de acuerdo a la especie de la que se trate”, agrega.
Factores que podrían afectar
Martino agrega que “la mala calidad del agua y una alimentación inadecuada son factores que pueden afectar el desarrollo normal de los peces y generar enfermedades. Incluya los accesorios básicos como oxigenador, filtro y un buen sistema de iluminación”.