Cargando...
La doctora Lorna Muñoz, veterinaria, afirma que los síntomas son los sonidos, es decir, la tos seca, persistente, que da la impresión de que el perro desea escupir algo. Así también el tono ronco o incluso la disfonía o completa afonía del animalito. Muchos propietarios consultan pensando que ‘algo’ quedó atorado en la garganta de su mascota, pero no es así, ya que se trata de un síndrome respiratorio complejo; que incluye rinorrea (descarga nasal de líquida a purulenta), faringitis o laringitis (inflamación de la garganta), otitis y conjuntivitis cuando se inflaman los párpados con o sin lagrimeo y presencia de legañas. También puede cursar con fiebre, vómitos, diarrea y dolores en el área del cuello.
Por su parte, la doctora Eliana Cardozo, veterinaria, menciona que los perros, al igual que los humanos, también se resfrían y se pueden engripar. La exposición al clima frío o a ciertos virus pueden causarlos. Lo importante es que al observar los síntomas en nuestras mascotas acudamos al veterinario para que este determine si se trata de una gripe o un simple resfrío, o si podría ser otra enfermedad más grave que necesite cuidados especiales, como el moquillo que tiene síntomas parecidos. Ayúdelos.
“Los perros resfriados tienen que mantenerse calentitos, secos y alimentarse adecuadamente”, aconseja la veterinaria Cardozo.
La doctora Muñoz refiere que “la prevención es esencial y consiste en el abrigo principalmente, ante los cambios de clima, ya que a ellos también les afecta las temperaturas extremas”.
Otro punto es “la desparasitación, ya que los parásitos pueden ser causantes o ayudar a que el cuadro empeore, por lo general se debe realizar cada tres meses, sobre todo en la cercanía de los cambios de estación”, acota.
La especialista enfatiza la importancia de “las vacunas polivalentes que dan inmunidad contra los agentes causales del síndrome respiratorio estacional, como el virus de la parainfluenza en los caninos y la rinotraqueitis en felinos”.