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En primavera y verano es necesario cambiar su base, utilizando un recipiente con buen drenaje y un buen compost. Un tiesto de 13 cm de diámetro es adecuado, pues los Pelargonium florecen en macetas relativamente pequeñas. A lo largo del año vaya quitando las flores marchitas, cortando el tallo cerca del par de hojas más próximo: arranque también las hojas marchitas y descoloridas. Procure que sus plantas estén en el sitio más soleado de la casa y manténganlas bien ventiladas.
Mantenga la mezcla apenas húmeda y en un sitio a media sombra.
Riegue en abundancia cuando el suelo esté seco, pero deje que el compost pierda toda el agua antes del próximo riego. Añada al agua un fertilizante líquido cada dos semanas.
En verano elija esquejes del tallo de unos 10 cm de largo, cortando justo debajo de un nudo. Arranque todas las flores, pimpollos y hojas inferiores; sumerja las plantas cortadas en hormonas de enraizamiento y luego introduzca los esquejes hasta las hojas inferiores, en partes iguales de turba y arena gruesa.
Pelargonium zonale es uno de los más populares y el color de las flores varía del blanco al rosa, rojo, salmón, naranja, bordó y los multicolores. Son arbustivos y de tallo grueso, y suelen alcanzar entre 30 y 60 cm de altura.