Considere ciertos aspectos técnicos (tamaño de la copa, de la raíz), la forma de la piscina (líneas rectas, curvas) y por sobre todo el gusto de cada cliente en cuanto a la elección de plantas.

Las palmeras ornamentan bastante a las piscinas, y dan un aire tropical, es ideal ponerlas en grupos de 3 y repetirlas en otras zonas (pindó, koko Phoenix) pero a unos 3 metros de la piscina, para que las raíces no perjudiquen la estructura. Si la piscina tiene curvas, se puede jugar en las mismas, con piedras y plantas pequeñas como strelitzias, iris, clusias, phormios, nunca se deben usar plantas espinosas como tunas, agaves, que pueden lastimar.

Si se busca un poco de sombra, se puede plantar un árbol, pero a unos 4 a 5 metros de la piscina, de modo que la raíz no pueda afectar a la estructura y el follaje no ensucie el agua.

En el caso de que la pileta tenga cascada, o cortinas de agua, se pueden utilizar plantas como: lágrima de amor, bromelias, jazmín colgante, papiros y plantas rastreras de sol.

En el caso de que la piscina tenga un piso térmico muy amplio o algún deck de madera, que hace que el espacio se vea muy grande, se podrían poner macetas con plantas como: árbol del viajero, palmera cariota, palmera pindó, con rastreras en la base de las macetas, para lograr mucho verde, que contrasta muy bien con el color marrón de la madera, también se pueden utilizar macetas chatas con flores varias, de diferentes tamaños en alturas, que dan el toque de color a la piscina.

Asesoró: Marta Abente.