Son adaptables al dueño, pero no es conveniente tenerlos sueltos porque roen cables, zapatos, todo lo que esté a su alcance.

Se los puede tener en jaulas de vidrio, de metal o plástico. No deben faltar sus comederos, bebederos y la rueda para que no se engorden.

El aserrín es necesario porque allí van hurgando, y también absorbe la materia fecal y orina de los animalitos. Se cambia cada 3 a 5 días. En verano es más frecuente porque fermentan más rápidamente los olores.

No es conveniente que estén en lugares muy fríos ni muy calientes porque morirían.

Los hamsters son mamíferos, nacen como los ratones desprovistos de pelo, tienen solo piel, a la semana se cubren de pelos, y eso les protege. Empiezan a comer a los 12 días un balanceado para conejos, pero hay que adherirle semillas de girasol, maní con cáscara, para que gasten sus dientes. Además tienen que comer verduras, zanahorias, repollos, cáscaras de pepino, frutas como manzana.

Estos animales no se mojan, no deben bañarse. No tienen vacunas ni medicamentos. Si el veterinario lo considera, se puede agregar un antiparasitario o vitaminas en el agua. Tienen un periodo de vida de 24 a 36 meses máximos.

Los machos son muy evidentes por los testículos muy grandes.

Los hamsters son muy temerosos, si se les toca a las crías, por defenderlos empiezan a comerlos. Hay que tocarlos con guantes en esos días.

CUIS O CONEJILLO DE INDIAS

Es un animal más grande que el hámster, pero se alimenta de lo mismo: balanceado para conejos, además de verdes, como lechuga y la zanahoria. Pueden estar sueltos sin problemas, reconocen al dueño, dan unos silbidos cuando se acercan. Les gustan las frutas y cavar en el jardín. No tienen vacunas.

Se pueden bañar cuando se ensucian. Se les puede tener en una jaula espaciosa porque son grandes.

Los hamsters y cuises procrean hasta 12 crías varias veces al año.

Asesoró: Dra. Carmen Romero, de Golden Pet, Mariscal López Shopping.