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El amplio terreno era una quinta familiar, a la que solo venían los fines de semana, y luego la familia decidió mudarse.
Ventanales a modo de bow windows se colocaron en la sala, que se enmarcan con cortinas de brocato y otras romanas, que protegen del sol.
La casa de dos pisos cuenta con una entrada que ayuda a la distribución, a la izquierda la sala y comedor, y a la derecha, cuarto de baño social y estar diario.
En la entrada hay un mueble de Quality y la araña de Arte en hierro. Todo está cambiado de lugar, muebles, objetos, cuadros, bajo la supervisión de Sandra Dos Santos, quien devolvió actualidad a esta residencia que cuenta con nueve años.
El proyecto fue del Arq. José María Segalés, quien optó por terminaciones de gran belleza, como el piso de madera y las tejas de cemento. Las tapicerías fueron hechas por la decoradora Ximena Samaniego y El Fabricante, también están cuadros de artistas paraguayos.
En la sala hay dos alfombras, una felpuda y otra de cuero pintada. Arcos de medio punto se encuentran entre cada área y en las aberturas se utilizaron blíndex y carpintería de petereby. Las plantas son de Mix Hogar y los arreglos los hizo Jorge López. Todo está cuidadosamente colocado para que brille con luz propia en 500 metros cuadrados. En el nivel superior se hallan las habitaciones en suite, con sus vestidores, y un balcón hacia el precioso jardín.
Algunos signos del estilo inglés son fácilmente descubiertos, como la opción por el ladrillo rojizo y los techos empinados. Toda la deco posee una marcada distinción con espejos, porcelana y cristal. Afuera el sol tibio de mayo invita a recorrer el jardín poblado de pinos, arbustos y flores.
mirtha@abc.com.py