En nuestro país, durante la época de fructificación del mango, las calles y los campos se cubren de este fruto, siendo un factor de molestia y poco aprovechado por los consumidores. El mango común tiene mucha fibra, pero puede ser utilizado como materia prima para la fabricación de dulces, helados, concentrados y jugos de fruta. Hay que destacar que el mango nacional no necesita de ningún tipo de tratamiento químico para lograr su sabor y calidad.
Las variedades híbridas introducidas en el Paraguay se han adaptado muy bien, teniendo altos índices de producción y dando frutas de mucha calidad. Pese a ello, esta nueva alternativa no ha sido aprovechada adecuadamente y la comercialización de esta fruta solo se realiza en estado fresco; sin utilizar una clasificación adecuada que permita contar con precios diferenciados, según tamaño, grado de maduración y calidad, de tal forma que el productor pueda tener interés en intensificar la producción de estas plantas.
En los países donde abunda esta planta, los mangos se comercializan en forma fresca, ya sea envasados al natural o cortados en finas tajadas que son presentadas envasadas al vacío en los hoteles, restaurantes o aviones, entre otros.
El carozo fresco constituye el 13 % del peso de la fruta, del 55 al 65 % del peso del núcleo. Este puede ser un importante subproducto de la industria de la transformación. Después de remojarlos, se secan y se muelen como harina, que incluso puede mezclarse con harina de trigo, mandioca o de arroz para preparar panes y tortas. De la semilla se puede extraer la grasa que es de color blanco, sólida como la manteca de cacao, pudiendo usarse en repostería. En países como la Repúblicade China, su industrialización ha hecho posible que esta fruta sea utilizada en forma integral; es decir, la pulpa y las semillas para la alimentación humana y animal.
Sistemas simples han sido desarrollados por institutos de investigación en Taiwán, en donde los mangos semimaduros pasan por una máquina que pela la fruta y la deja con la pulpa al descubierto, siendo después fácil de cortar. Esta puede ser utilizada en forma fresca o destinada a la industria para su secado y posterior envasado al vacío, lo que hace que su tiempo de conservación sea prácticamente ilimitado. La preparación de harina de mango es otra buena alternativa de industrialización. Se obtiene un material de color amarillo cremoso, con el sabor característico de la fruta. Es preferible usar los mangos pintones, antes de madurar totalmente la fruta, para mantener el sabor y la textura. La industrialización del mango permite al productor aumentar la cantidad de plantas protegidas de los insectos por medio de tecnologías específicas y desarrolladas por los investigadores de los diferentes centros especializados distribuidos en todo el país. Aumentar el aprovechamiento de mango que crece en todo el país es una opción en la que hay que insistir, tanto a nivel de cultivo como de su industrialización.
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