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MADURACIÓN
El coco posee varios racimos que no obtienen su madurez en un solo momento, sino que, por el contrario, va madurando racimo tras racimo a lo largo del año. Esto es muy importante y el agricultor debe tenerlo en cuenta. Entonces, al cosechar frutos de buena calidad, los subproductos que se obtengan después del procesado serán también de buena calidad. Por ello resulta fundamental para las industrias la observación, clasificación y selección del coco, por cuanto los frutos que fueron cacheados presentan características particulares, por lo cual son rechazados para su utilización industrial.
INDUSTRIALIZACIÓN Y SUBPRODUCTOS
Del fruto del coco se obtienen varios subproductos o derivados que tienen numerosas utilidades. El primer paso de la industrialización es el zarandeo, que permite obtener el pericarpio, un derivado que se utiliza como material de combustión. Además, en las grandes industrias, se utiliza para el encendido de las calderas, lo que hace posible el ahorro de miles de metros cúbicos de leña por año.
Si se practica un zarandeo más riguroso, se obtiene una materia orgánica que actúa como abono y que se incorpora al suelo. Este subproducto es muy utilizado en el cultivo de caña de azúcar. Una vez terminado el proceso de descascarado, el siguiente paso es la despulpación, donde se separa la pulpa del carozo que cubre la almendra. La pulpa pasa por un proceso de prensado de donde se extrae el aceite de pulpa, con el cual se elabora el jabón que se usa para el lavado de ropas. Del prensado de la pulpa de coco también se obtiene un ingrediente que se utiliza en la elaboración de alimentos balanceados, principalmente para bovinos.
Otro de los componentes que se utilizan en la elaboración de productos derivados es la almendra. Las almendras del coco son sometidas a un proceso de calentamiento para luego pasar por una prensa. De este modo, se extrae y obtiene el aceite de almendra que se utiliza en la fabricación de jabones de tocador. El subproducto obtenido de la extracción del aceite se utiliza como materia prima para la alimentación del ganado bovino y de los cerdos. Esto se debe a que presenta valores bromatológicos muy importantes para utilizar como alternativa en la nutrición animal.
Otro elemento que deriva del coco, y que es muy utilizado, es el carozo. Después de su paso por la despulpadora, los frutos llegan a la rompedora, donde las almendras se separan de los carozos. Estos tienen un importante poder calórico que los convierte en una materia prima que, al igual que el pericarpio, sirve como material de combustión.
CULTIVO ESTRATÉGICO
Vemos que el coco posee muchas cualidades, por lo que es necesario darle su debido valor como cultivo y por los subproductos que se obtienen del mismo. Hay que aclarar que la utilización de los subproductos del coco, en este caso el aceite de pulpa y de almendra, en la elaboración de alimentos balanceados, no implica que el alimento tenga un sabor a jabón como erróneamente se piensa, pues se trata de procesos diferentes. Las cualidades y virtudes de los subproductos del coco han sido científicamente estudiadas, habiéndose demostrado que los resultados obtenidos en su utilización son excelentes.
(*) Técnico – Industrial Aceitera