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Años atrás, una familia decidió instalarse en el departamento de Guairá, específicamente en la compañía Mayor Cué, con el objetivo de producir plantas medicinales para la comercialización. Dicha iniciativa trajo consigo la formación de comités de agricultores, a quienes se les enseñó las prácticas y manejos básicos de determinadas especies. El cultivo de hierbas medicinales permite a los productores obtener ganancias interesantes y representa una alternativa para ocupar la tierra en conjunto con los rubros de autoconsumo.
VENTAJAS ECONÓMICAS
Para producir hierbas medicinales, es necesario considerar principalmente la mano de obra, debido a que la yerba mate, el romero y la rosa mosqueta requieren de manejos específicos.
En cuanto a los precios, la hoja verde de yerba mate se cotiza a G. 1000 el kg, mientras que la rosa mosqueta llega a los G. 18.000 por kg de hoja seca. El romero también posee gran demanda en el mercado, produciéndose en la zona unos 2000 a 2500 kg/ha al año. Su follaje seco es comercializado por los productores a G. 20.000 el kg.
OTROS RUBROS
Anteriormente, muchos de los productores del departamento del Guairá se dedicaban a la caña de azúcar como rubro de renta. Sin embargo, las complicaciones en el precio, los costos de logística, mano de obra y las dificultades al momento de la cosecha, los llevaron a dedicarse a las plantas medicinales y a las especias. A su vez, los cultivos de autoconsumo, como el poroto, maíz y otros forman parte de la cultura alimentaria de esta zona del país. Hoy en día, el rubro de las plantas medicinales permite generar ingresos a la pequeña agricultura familiar, sea por el cultivo y comercialización o únicamente por la cosecha de parcelas cultivadas con estas especies.
(*) Especialista en plantas medicinales
