Los parásitos externos -llamados también ectoparásitos- como garrapatas, uras, sarnas, tábanos y moscas de los cuernos, entre otros, no respetan edad, produciendo sus efectos deletéreos desde el nacimiento y durante toda la vida del animal.
Citamos a continuación algunos de los innumerables problemas que ocasionan los ectoparásitos.
La permanente succión de sangre de las garrapatas puede llevar a la muerte del animal por intensa anemia. Esto solemos observar en los tambos, en terneritos muy garrapateados.
Las heridas supurantes que dejan las picaduras de garrapatas suelen acarrear bicheras o gusaneras que son muy dañinas para la salud del animal. Además, esas heridas suelen infectarse y conducir a mortales septicemias.
Otro problema, que muchas veces no tenemos en cuenta, es que las garrapatas prendidas a los tes-tículos -lugar muy preferido por la finura de la piel y la ausencia de pelos- producen inflamación e infección que pueden llevar a la subfertilidad o infertilidad del toro.
Por último, recordemos que a la garrapata se le atribuye la transmisión de más de 50 enfermedades al vacuno.

ALGUNOS TRANSMISORES DE ENFERMEDADES
Los tábanos y moscas de los cuernos son muy perjudiciales ya que también se alimentan de sangre y a la vez pueden ser transmisores de varias enfermedades. Además causan mucha molestia al animal porque no le permiten alimentarse y descansar convenientemente.
La ura, que es el estado larvario de una mosca, causa muchas pérdidas a nuestra ganadería, principalmente en la Región Oriental. Los cueros provenientes de esa parte del país casi no tienen valor comercial por los daños producidos por uras y garrapatas.
Durante el desarrollo del pasado Rodeo Trébol en Loma Plata, el Dr. José Luis Cosp dio una charla sobre la importancia del cuidado de nuestros cueros vacunos. Citó cifras alarmantes -cientos de millones de guaraníes- que dejamos de percibir por la pésima calidad de este subproducto.
El control de ectoparásitos ha sido siempre la gran preocupación de los laboratorios de productos veterinarios, que han desarrollado infinidad de drogas cuyas formas de uso y presentación escapan a la imaginación. Por solo nombrar a algunas podemos citar: bucal: líquida, pastosa o en forma de bolos; inyectable: subcutánea, intramuscular, intrarruminal; aspersión, inmersión, pour on. Podemos agregar a todos estos nuestra folclórica y "muy científica" manera de combatir ectoparásitos: con pinceladas de aceite hû.

METODOS UTILIZADOS
En el presente artículo, trataremos solamente los métodos de aspersión e inmersión, ya que consideramos a los otros impracticables desde el punto de vista económico en ganadería de cría extensiva (menos el aceite hû).
Para los baños de aspersión se utiliza un equipo con bomba manual tipo mochila de aproximadamente 20 litros de capacidad, donde se mezcla agua con el insecticida elegido. Es el método más generalizado en Paraguay. Al pasar por el brete se "baña" al animal.
Otros pocos establecimientos utilizan bombas a motor que con gran fuerza expulsan la mezcla y así logran "bañar" en el corral un gran número de animales al mismo tiempo.

NO REPRESENTAN SOLUCION
Los "baños" realizados de esta forma han demostrado fehacientemente que no son muy eficaces. La población de garrapatas, moscas de los cuernos y uras siguen tan abundantes y perjudiciales como cuando aparecieron por primera vez en nuestros rodeos.
No solamente estas plagas no han disminuido, sino que cada vez son más resistentes a los productos que tratan de combatirlas. El motivo es que por el método de aspersión solo una parte del cuerpo del animal es rociado y, por ende, muchos ectoparásitos ubicados en partes no mojadas no entran en contacto con la droga o lo hacen deficientemente y en poco tiempo se crean cepas resistentes. Además, el efecto residual repelente de la droga es mucho menor, por ser menor la parte del cuerpo del animal que estuvo en contacto con la misma, ya que generalmente solo se mojan cabeza, dorso, lomo y un poco de costillar.
Que sigamos utilizando este método de descontrol de ectoparásitos es una práctica con muchas fallas. Este punto es uno de los tantos que deberíamos mejorar para aumentar nuestro stock ganadero.

LA MEJOR FORMA DE BAÑARLOS
Con el baño de inmersión, la situación cambia completamente. Como su nombre lo indica, con este sistema el animal se sumerge en el baño.
El baño se realiza en un piletón, por así llamarlo, de forma rectangular hecho generalmente de ladrillo, piedra, arena, hierro, cal y cemento, de aproximadamente 15 metros de largo; 0,90 metros de ancho; 2,15 metros de profundidad y con una capacidad de 10.000 a 12.000 litros de agua mezclada con el insecticida elegido.
El baño, situado al final del brete, permite ir largando de a uno a los animales, los que, luego de nadar por toda su extensión, salen por la rampa completamente mojados. Como algunos pocos animales no se zambullen por completo, dos personales u "horquilleros", situados a mitad del baño, con sus horquillas empujan la cabeza del animal y así también este queda bajo el agua por un breve lapso, logrando de esta manera la completa inmersión. Esto es sumamente importante, porque de esta manera las pequeñas y voraces garrapatillas alojadas en los pabellones internos de las orejas también entran en contacto con el líquido.
El costo de un baño de inmersión con todos sus accesorios -escurrideros con piso de cemento, pileta de cubicación, techado completo- ronda los 25 a 30 millones de guaraníes. Esta inversión se justifica plenamente, ya que una instalación bien construida es prácticamente eterna y su beneficio incalculable.

BAÑOS DE INMERSION
Con baños de inmersión, los Estados Unidos, Méjico y Uruguay han erradicado prácticamente la garrapata común del ganado o sea el Boophilus microplus. Argentina está en el mismo camino; y hoy, el Plan Nacional de erradicación de la garrapata está próximo a ser una realidad en ese país.
Con los baños de inmersión no solo la garrapata se combate eficazmente. La población de uras, moscas de los cuernos, sarnas y piojos disminuyen muy rápidamente.
Con la correcta implementación de este método, veremos cómo mejora, sustancialmente, el estado general de la hacienda y su productividad. Disminuirán las enfermedades transmitidas por ectoparásitos, y el valor de nuestros cueros se verá sumamente incrementado.
Como dijimos al principio, aquí presentamos al productor el método que consideramos muy efectivo y fundamentalmente, económico. Si él prefiere "tantear" con otros como endectocidas, pour on u otros, que los pruebe. Después de un tiempo le preguntaremos cómo le ha ido.

Información completa y detallada sobre baño de inmersión, como así también un plano para la construcción del mismo se puede encontrar en el Manual práctico del hacendado de Bayer.
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