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Uno de los parásitos que más ataca a las majadas de ovejas es el Haemonchus contortus, que se puede controlar muy bien revisando cada ocho días las mucosas de las ovejas. Entonces, si se detecta, es posible su tratamiento con antiparasitarios convencionales, como lo son los del grupo de levamisoles y benzimidazoles. Aunque, en el caso específico del haemonchus es posible tratar con una droga determinada como el closantel. En cada caso, el productor deberá seguir las indicaciones del veterinario de tal forma a no aplicar el antiparasitario en cualquier momento. Cada producto, con la dosis a utilizar, tiene su época de acuerdo al calendario sanitario.
La recomendación de aplicar en tiempo y forma se debe a que muchos parásitos adquieren resistencia a los fármacos. Entonces, la desparasitación no se ejecuta frecuentemente, sino al momento de la aparición del problema.
DIAGNÓSTICO
Debido a que la parasitosis causa una anemia fuerte en el ejemplar, una de las formas de detección es controlando la mucosa ocular de las ovejas. El lugar indicado para observar es la parte inferior del ojo. El color ideal que debe tener en esta zona es rojo intenso. Si el tono de la mucosa tiende a una palidez es casi seguro que el animal presente una alta cantidad de parásitos.
(*) Técnico especialista en ovinos