Control de la leishmaniasis - Dr. Oscar A. Tami Vasconsellos (*)

Un punto clave para el tratamiento de la Leishmaniasis Canina (LC) es establecer el diagnóstico con la mayor precocidad posible, incluso antes de que se presenten los síntomas. La controversia, desde hace tiempo, radica en las técnicas serológicas aplicadas para determinar la presencia de la enfermedad, las cuales, en muchas ocasiones, no conducen a la toma correcta de decisiones con respecto al animal.

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2057

Cargando...

El diagnostico de la leishmaniasis canina debe incluir una buena anamnesis (la historia clínica es fundamental), un examen físico exhaustivo y una serie de pruebas laboratoriales, tanto especificas como inespecíficas. Los métodos cualitativos RK39 pueden ser útiles para un primer examen, pero en los casos positivos debe realizarse siempre una cuantificación de los niveles de anticuerpos, mediante técnicas cuantitativas registradas, como el Elisa S7 Biogene, en laboratorios especializados.

LEISH Y SU RELACIÓN CON EL DIAGNÓSTICO

Antes de hablar de técnicas serológicas, es importante saber que la LC puede ser: tegumentaria (cutánea simple, mucocutánea y cutánea difusa), por un lado, y visceral, por otro. En este sentido, las técnicas RK39, IFI (inmunofluorescencia indirecta) o Elisa, utilizadas en las instituciones públicas (como PCR realizado comercialmente), no diferencian a caninos con L. tegumentaria de aquellos con L. visceral. Únicamente el test de Elisa S7 Biogene permite diferenciar ambos tipos de LC. En países con mayor prevalencia e incidencia de la enfermedad, las normas de vigilancia sanitaria concuerdan que perros portadores de L. tegumentaria no precisan ser sacrificados, pues no son importantes en la cadena de trasmisión de la enfermedad.

ANÁLISIS

Por motivos económicos y técnicos es más accesible y disponible la serología cuantitativa Elisa S7 Biogene como elemento diagnóstico, y es concluyente en animales y humanos con títulos altos de anticuerpos, acompañados de signos clínicos o alteraciones clínico-patológicas.

La técnica Elisa S7 Biogene no requiere material y personal costosos, y es muy conveniente en zonas en las que los medios sanitarios y económicos son escasos.

FÁRMACOS PARA TRATAMIENTO

El estibogluconato sódico es el fármaco de elección para el tratamiento de la leishmaniasis visceral (LV) y en las formas cutáneas y mucocutáneas de las leishmaniasis mediterránea, india, china, trópico y subtrópico. El antimoniato de meglumina es utilizado en las formas cutáneas y mucocutáneas, aunque resulta menos eficaz cuando la enfermedad es visceral. Los resultados actuales evidencian una creciente resistencia parasitaria al fármaco. Lamentablemente, los medicamentos mencionados no están disponibles para veterinarios y personas del sector privado en el Paraguay. Nuestro país ni siquiera cuenta con antídotos específicos ni vacunas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado en el 2007 que el antimoniato de meglumina (Glucantime) seria comercializado por agencias del sector público al precio de USD 1,2 por cada ampolla de 5 cc, más los costos impositivos. El problema de la terapéutica es el acceso, no a un medicamento, sino a los antileishmaniasicos, al antídoto y a las vacunas antileishmaniasis.

VACUNA

Científicos brasileños de la Universidad Federal de Río de Janeiro (Brasil), en asociación con el laboratorio Fort Dodge de Salud Animal de los Estados Unidos, elaboraron una vacuna segura, efectiva y protectora contra la leishmaniasis visceral canina, con resultado auspicioso. Las evaluaciones realizadas han permitido la autorización como primera vacuna comercial para la LCan, Leishmune.

Igualmente, en el Brasil se cuenta con la vacuna Leish-Tec, recombinante contra la leishmaniasis visceral canina.

ALTERNATIVAS DE CONTROL

Desde 1997 se dispone del uso de collares impregnados a base de insecticidas específicos, como la deltametrina, que puede proteger hasta un 96 % a los perros de las picaduras de los vectores o karacha. El collar está disponible en nuestro país. Por otra parte, la aplicación tópica de permetrina proporciona un buen efecto repelente e insecticida. Es igualmente importante la aplicación de insecticidas y piretroides específicos en las modalidades de “fumigaciones y pulverizaciones”, con el fin de destruir a los agentes trasmisores del mal. El control biológico de los vectores también representa una alternativa de control mediante el cultivo de especies, como la albahaca, ajenjo, estragón, lavanda, madreselva, manzanilla, margaritas multicolores, piretro, citronela, laurel, cedrón, salvia, eucalipto, nogal, árbol de Neem y catalpa.

INEFICACIA DE LA EUTANASIA

En el 2006 ha sido ampliamente demostrado que el sacrificio de perros seropositivos tiene un limitado impacto en el contexto de la trasmisión de esta enfermedad y mucho menos en la reducción de la incidencia en casos humanos y caninos respectivamente. Numerosos resultados no solo demuestran, sino que ponen en tela de juicio la efectividad del programa de sacrificio o eutanasia y manifiestan la necesidad de buscar e implementar nuevas estrategias de control para la LV. El sacrificio de las mascotas es ineficaz, porque otros animales, inclusive el humano, también son reservorios de la enfermedad para el flebótomo, lutzomya o karacha (insecto transmisor de la enfermedad).

(*) Especialista en medicina veterinaria

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...