Con ramificada cornamenta, de tamaño razonable para caminar por la espesa vegetación; con largas y distendibles pezuñas unidas por una membrana interdigital muy fuerte, que le permite moverse con facilidad en los terrenos pantanosos, y con un exquisito colorido pardo rojizo, luce su airosa estampa uno de los más bellos animales de la fauna sudamericana: el ciervo de los pantanos.
Este animal, habitante de las orillas de ríos, arroyos y selvas pantanosas, se encuentra en peligro de extinción y es necesario preservarlo. Aunque resulta difícil observarlos, a veces aparecen en nuestras selvas un macho con dos o tres hembras y sus crías pastando plácidamente, asustándose ante la presencia de los hombres, y huyendo rápidamente con sus colas levantadas, lo que hace que luzcan una bella estampa. Pero si en el momento de peligro se encuentran entre el malezal, se acuestan o permanecen inmóviles, cubiertos así por la alta vegetación y evitan ser vistos.
Gustan mucho de los pantanos y humedales, y en nuestro país se encuentran en las dos regiones; son habitantes naturales de Sudamérica desde la Amazonia peruana, pasando por el centro brasileño, Paraguay y Argentina.
CARACTERISTICAS FISICAS
En cuanto a su aspecto físico, podemos distinguir en él un color rojizo con patas y morros negros, pezuñas largas y negras unidas por una fuerte membrana, que le permiten desplazarse en el barro y en el agua, donde viven.
Sus orejas son largas al igual que sus patas, y la cornamenta que adorna a los machos está dotada de cuatro puntas, pero en los machos muy viejos pueden darse ramificaciones mayores. Así también, ellos tienen su desmogue, esto es el cambio de cuernos, pero no se conocen con exactitud las fechas en que este fenómeno ocurre.

Su accionar habitual lo realizan durante el día, pero en fechas muy calurosas gustan activar en las horas crepusculares, pudiendo movilizarse durante las noches por cambio en la estación o por la presión de los cazadores que apetecen su carne y su cabeza con cornamenta para trofeo en sus paredes.

SU HABITAT
En la generalidad de los casos, viven muy ocultos entre la tupida vegetación de su hábitat, y son tan curiosos como escurridizos, huyendo raudamente ante el peligro, ya sea como grandes nadadores, que lo son, o como eximios corredores, gracias a sus fuertes y largas patas. Su alimentación está compuesta principalmente por pastos y leguminosas.

REPRODUCCION Y GENERO
El celo de estos animales se presenta en cualquier época del año, y con una gestación de aproximadamente doce meses dan a luz un solo cervato, el cual adquiere su adultez y madurez sexual más o menos a los dos años de edad.
Así, con una alzada de 1.10 a 1.20 m, un largor de cabeza y tronco de 1.80 a 1.95 m, un largo de cola de 10 a 15 cm, y un peso estimativo entre 100 a 150 kilos, el ciervo de los pantanos pertenece al género Blastocercus, a la especie Blastocercus dichotomus, a la clase mamíferos, al orden artiodáctilos, y a la familia de los cérvidos.