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Raquel Cantero recuperó la sonrisa gracias al cuidado de las plantas. “Dedicarme a ellas, ya sea para coleccionar o preparar, con mucho cariño, planteritas para regalar o para la oficina fue absolutamente casual”, cuenta en su oficina ubicada en el piso 16 del World Trade Center.
“Me ayudó a sobrellevar los problemas que tenía en la familia, con la enfermedad de mi papá y mi hijo. Fueron tres años muy duros y no dormía bien. Aunque abría los ojos, mi visión era muy limitada y vivía sin sonreír, con el rostro duro. Creo que, desde que empecé a manipular mis plantas, encontré la excusa para sonreír. Las reproduzco y mimo mucho, siento que nos llevamos bien y tenemos una comunicación única”, añade.
Su amor de madre la llevó a sacar fuerzas de donde no tenía para absorber los costos de salud y, a la vez, recuperar el optimismo ante situaciones adversas. “La experiencia renovadora que pasé al trabajar con los cactus no podía quedarse solo conmigo; tenía que compartirla. En un grupo de WhatsApp llamado ‘Sucufans’ pasé mis vivencias y ahora soy activa participante, organizando eventos y pasando informaciones, al igual que todas las que lo conforman. Es un grupo muy dinámico, con reglas muy claras sobre el comportamiento, para no dispersarnos de nuestro objetivo, que es saber más sobre su siembra y cuidados”.
Raquel está convencida de que como terapia es una de las mejores alternativas, ya que, además de ayudarles emocionalmente, si se da el caso, les aporta un ingreso monetario. “El fin no es lucrar, sino más bien encontrar un espacio en el cual ‘cultivarnos’ y relajarnos... Para mí, redescubrir que hay cosas bellas aún en el mundo fue muy importante. Cuando sentí que todas las luces se me apagaban, encontré alivio en las suculentas. Sinceramente, estas plantas me hicieron mejor persona, me dieron fuerza para enfrentar lo que me deparaba y me devolvieron a mis hijos”, cuenta emocionada.
Su entusiasmo le llevó a organizar el Sucutape, algo así como un itinerario para encontrar todas las variedades de suculentas y cactus, de manera que elijan los lugares que mejor les quede, de acuerdo a las direcciones de sus casas. “Me gustaría que hombres y mujeres que estén atravesando por situaciones difíciles entiendan que, encontrando alguna actividad que les brinde satisfacción, pueden recuperar los ánimos y ver lo bello de la vida o recuperar las ganas de vivir, como me pasó a mí”.
¿Qué nos puede decir de las suculentas?
Las suculentas son plantas que almacenan agua y son fáciles de propagar. En muchas especies se pueden cultivar nuevas plantas a partir de hojas caídas. Imagínense cuántas se pueden reproducir o regalar. Ahora, ¿qué diferencia hay entre estas y los cactus? Todos los cactus son suculentas, aunque no todas las suculentas son cactus. Las suculentas son plantas que almacenan el agua en sus tallos, raíces y hojas. Los cactus son plantas carnudas que almacenan agua, pero no tienen hojas. Según algunos expertos, “las espinas son sus hojas”. Los cactus son simplemente una familia o subcategoría dentro del grupo de plantas conocidas colectivamente como suculentas. No necesitan mucha atención y prosperan bien en interiores. Además, resultan muy decorativos, y la mayoría se adapta bien al calor y al ambiente seco del hogar. Puede ser un buen regalo para mamá en su día.
Sepa más
Sucufans estará en el Shopping Multiplaza del 7 al 11 de mayo y el 18 en Agrofield (casa central).
Fotos: ABC Color/Silvio Rojas.