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Ubicada en pleno pantanal, esta laguna nos recuerda que aún tenemos una oportunidad para buscar un desarrollo sostenible que beneficie a todas las formas de vida, incluyéndonos a nosotros, los seres humanos.La laguna Boggiani está a unos 30 kilómetros al norte del casco urbano de Carmelo Peralta, siguiendo el tendido eléctrico que llega hasta Fuerte Olimpo. El esteral se encuentra dentro de la propiedad de la firma Ganadera Cuñataí SA.
El casco principal del establecimiento se localiza a orillas del río Paraguay, frente a un conjunto de serranías; para llegar a la laguna, se requieren 15 minutos de deslizadora, ingresando a uno de los sitios más increíbles de la frontera entre Brasil y Paraguay, por su extraordinaria belleza.
La laguna lleva el nombre del investigador italiano Guido Boggiani, quien, según la memoria popular, habría llegado a este mismo sitio antes del inicio de la Guerra del Chaco.
Laguna Boggiani forma parte de un conjunto de esterales que se extiende generoso en la ribera, con la particularidad de que se encuentra a los pies de unos cerros. Animales y plantas del esteral y de la serranía se encuentran en un mismo espacio. Aquí es posible encontrar plantas, aves, reptiles, mamíferos e inclusive grandes felinos como el yaguareté.
Como si fuera un gigantesco guerrero, el cerro Pan de Azúcar rodea con su imagen y magnificencia un verdadero tesoro: una laguna pequeña en medio del Pantanal, pero de extraordinaria diversidad de vida.
Ni soñar con efectuar un solo disparo dentro del establecimiento: no se puede cazar y las artes de pesca se respetan de forma puntillosa. Es la única forma de contribuir con su conservación.
A diferencia de muchos humedales hoy destruidos, el Pantanal aún ofrece a la humanidad una oportunidad para buscar un desarrollo sostenible que beneficie a todas las formas de vida, incluyéndonos a nosotros, los seres humanos.
Llegar a Carmelo Peralta
Carmelo Peralta se encuentra a unos 700 kilómetros al norte de Asunción. Se tienen dos opciones para llegar a la ciudad. Por el Chaco paraguayo, implica seguir la ruta Transchaco hasta llegar al Cruce de los Pioneros. En este punto, girar al este, con rumbo al río Paraguay, distante unos 260 kilómetros.
En los meses de otoño e invierno es un viaje agradable; en general, el camino se encuentra en buenas condiciones. Yendo sin apuro, se puede disfrutar de un viaje que tiene mucho de aventura. En verano es complicada esta alternativa porque las lluvias impiden el tráfico. El Alto Paraguay es el único departamento de nuestro país que no tiene ni siquiera un centímetro de asfaltado.
La segunda opción es ingresar por Brasil, en una suerte de triángulo que parte de Asunción, llega hasta Cruce Bella Vista y de allí se toma el camino que termina en Puerto Murtinho. Existe un tramo de 73 kilómetros que no está asfaltado, que es desde el cruce hasta la ciudad de Bella Vista Norte.
Cruzar el río Paraguay para llegar a Carmelo Peralta es fácil: tres o cuatro balsas están a disposición para transportar vehículos de una orilla a otra. El movimiento que rodea a ambas ciudades crea un ambiente especial, dando la impresión de que se ingresó en un espacio donde el tiempo no existe.
Y se tiene una tercera opción: tomar en Concepción uno de los barcos que surcan la ribera del Alto Paraguay, en un viaje único, absolutamente de aventura.
A partir de ese momento, ya no es posible pensar en función de horarios. La hora, tal como la concebimos en nuestra rutina diaria, no existe en Carmelo Peralta: el ritmo de vida es absolutamente más lento, más tranquilo, y se puede tener la impresión de que la sensación de modorra de la siesta no tiene pausas.
Ecorregiones
El Dr. Alberto Yanosky, director de la organización no gubernamental Guyra Paraguay, describe al Alto Paraguay como "un territorio único" y al describirlo lo hace con pasión: "El Alto Paraguay en su conjunto y Carmelo Peralta en particular integran una de las ecorregiones más ricas del planeta: el Pantanal, que es el esteral más grande de la Tierra. Este territorio lo compartimos con Brasil y Bolivia. Sin duda alguna, el Pantanal es una región de prioridad global para su conservación".
Mencionó que el Pantanal abarca unos 150 mil kilómetros cuadrados, ocupando un territorio mayor que Costa Rica e Inglaterra. El Pantanal es depositario de uno de los bienes más preciados por la humanidad: agua dulce, de allí la importancia de su conservación.
El problema es que ninguno de los tres países puede conservarlo por sí solo. Se requieren acciones conjuntas y acciones que superen las fronteras nacionales, del mismo modo que el Pantanal supera los límites impuestos por el hombre.
Explicó Yanosky que "en el área se puede ver una transición entre el Pantanal propiamente dicho y el Chaco húmedo. Ambos ecosistemas probablemente sean los más productivos del mundo por los servicios que prestan, en particular por el agua dulce".
Señaló como una paradoja que el Pantanal es uno de los sitios más desconocidos para la ciencia, dado que allí se encuentran animales y plantas de extrema variedad, precisamente porque coinciden ecosistemas variados.
Entre los desafíos que enfrenta el Pantanal para sobrevivir, que en definitiva es nuestra propia supervivencia, se encuentra el fuerte proceso de deforestación que golpea al área. Para colmo, Paraguay es el principal problema: la agricultura y la ganadería avanzan a un promedio de 1000 hectáreas por día, arrasando con todo lo que encuentran a su paso.
No se trata de priorizar uno sobre el otro, sino de generar mecanismos de producción sustentables. "Hay que asegurar que los recursos naturales que dan sustento a la economía del país continúen generando riquezas para todos, sin olvidar a las generaciones venideras. Queda claro que no se puede conservar sin producir así como no se puede producir sin conservar".
Más datos.
La laguna Boggiani se encuentra ubicada a unos 30 kilómetros al norte de la comunidad de Carmelo Peralta, a orillas del río Paraguay. Carmelo Peralta es un pequeño municipio que surgió hace unos dos años como un desprendimiento del distrito de Puerto Casado, en el departamento del Alto Paraguay. Carmelo Peralta vive a la sombra de la ciudad de Puerto Murtinho (Brasil).
Frente a Carmelo Peralta se ubica la Isla Margarita, donde se destaca el edificio de la Prefectura Naval de nuestro país y un montón de casuchas menores donde es posible comprar productos electrónicos. El movimiento de deslizadoras entre estos puntos es incesante; imposible aburrirse mirando cómo van de un lado a otro, en forma continua.
Mejor no hacer una comparación entre Carmelo Peralta y Puerto Murtinho. La segunda es una ciudad, mientras que Carmelo Peralta aún intenta superar los años en que era simplemente una colonia de Puerto Casado, aunque no por ello deja de tener el encanto particular de las localidades que se extienden en la ribera del Alto Paraguay.
El casco principal del establecimiento se localiza a orillas del río Paraguay, frente a un conjunto de serranías; para llegar a la laguna, se requieren 15 minutos de deslizadora, ingresando a uno de los sitios más increíbles de la frontera entre Brasil y Paraguay, por su extraordinaria belleza.
La laguna lleva el nombre del investigador italiano Guido Boggiani, quien, según la memoria popular, habría llegado a este mismo sitio antes del inicio de la Guerra del Chaco.
Laguna Boggiani forma parte de un conjunto de esterales que se extiende generoso en la ribera, con la particularidad de que se encuentra a los pies de unos cerros. Animales y plantas del esteral y de la serranía se encuentran en un mismo espacio. Aquí es posible encontrar plantas, aves, reptiles, mamíferos e inclusive grandes felinos como el yaguareté.
Como si fuera un gigantesco guerrero, el cerro Pan de Azúcar rodea con su imagen y magnificencia un verdadero tesoro: una laguna pequeña en medio del Pantanal, pero de extraordinaria diversidad de vida.
Ni soñar con efectuar un solo disparo dentro del establecimiento: no se puede cazar y las artes de pesca se respetan de forma puntillosa. Es la única forma de contribuir con su conservación.
A diferencia de muchos humedales hoy destruidos, el Pantanal aún ofrece a la humanidad una oportunidad para buscar un desarrollo sostenible que beneficie a todas las formas de vida, incluyéndonos a nosotros, los seres humanos.
Llegar a Carmelo Peralta
Carmelo Peralta se encuentra a unos 700 kilómetros al norte de Asunción. Se tienen dos opciones para llegar a la ciudad. Por el Chaco paraguayo, implica seguir la ruta Transchaco hasta llegar al Cruce de los Pioneros. En este punto, girar al este, con rumbo al río Paraguay, distante unos 260 kilómetros.
En los meses de otoño e invierno es un viaje agradable; en general, el camino se encuentra en buenas condiciones. Yendo sin apuro, se puede disfrutar de un viaje que tiene mucho de aventura. En verano es complicada esta alternativa porque las lluvias impiden el tráfico. El Alto Paraguay es el único departamento de nuestro país que no tiene ni siquiera un centímetro de asfaltado.
La segunda opción es ingresar por Brasil, en una suerte de triángulo que parte de Asunción, llega hasta Cruce Bella Vista y de allí se toma el camino que termina en Puerto Murtinho. Existe un tramo de 73 kilómetros que no está asfaltado, que es desde el cruce hasta la ciudad de Bella Vista Norte.
Cruzar el río Paraguay para llegar a Carmelo Peralta es fácil: tres o cuatro balsas están a disposición para transportar vehículos de una orilla a otra. El movimiento que rodea a ambas ciudades crea un ambiente especial, dando la impresión de que se ingresó en un espacio donde el tiempo no existe.
Y se tiene una tercera opción: tomar en Concepción uno de los barcos que surcan la ribera del Alto Paraguay, en un viaje único, absolutamente de aventura.
A partir de ese momento, ya no es posible pensar en función de horarios. La hora, tal como la concebimos en nuestra rutina diaria, no existe en Carmelo Peralta: el ritmo de vida es absolutamente más lento, más tranquilo, y se puede tener la impresión de que la sensación de modorra de la siesta no tiene pausas.
Ecorregiones
El Dr. Alberto Yanosky, director de la organización no gubernamental Guyra Paraguay, describe al Alto Paraguay como "un territorio único" y al describirlo lo hace con pasión: "El Alto Paraguay en su conjunto y Carmelo Peralta en particular integran una de las ecorregiones más ricas del planeta: el Pantanal, que es el esteral más grande de la Tierra. Este territorio lo compartimos con Brasil y Bolivia. Sin duda alguna, el Pantanal es una región de prioridad global para su conservación".
Mencionó que el Pantanal abarca unos 150 mil kilómetros cuadrados, ocupando un territorio mayor que Costa Rica e Inglaterra. El Pantanal es depositario de uno de los bienes más preciados por la humanidad: agua dulce, de allí la importancia de su conservación.
El problema es que ninguno de los tres países puede conservarlo por sí solo. Se requieren acciones conjuntas y acciones que superen las fronteras nacionales, del mismo modo que el Pantanal supera los límites impuestos por el hombre.
Explicó Yanosky que "en el área se puede ver una transición entre el Pantanal propiamente dicho y el Chaco húmedo. Ambos ecosistemas probablemente sean los más productivos del mundo por los servicios que prestan, en particular por el agua dulce".
Señaló como una paradoja que el Pantanal es uno de los sitios más desconocidos para la ciencia, dado que allí se encuentran animales y plantas de extrema variedad, precisamente porque coinciden ecosistemas variados.
Entre los desafíos que enfrenta el Pantanal para sobrevivir, que en definitiva es nuestra propia supervivencia, se encuentra el fuerte proceso de deforestación que golpea al área. Para colmo, Paraguay es el principal problema: la agricultura y la ganadería avanzan a un promedio de 1000 hectáreas por día, arrasando con todo lo que encuentran a su paso.
No se trata de priorizar uno sobre el otro, sino de generar mecanismos de producción sustentables. "Hay que asegurar que los recursos naturales que dan sustento a la economía del país continúen generando riquezas para todos, sin olvidar a las generaciones venideras. Queda claro que no se puede conservar sin producir así como no se puede producir sin conservar".
Más datos.
La laguna Boggiani se encuentra ubicada a unos 30 kilómetros al norte de la comunidad de Carmelo Peralta, a orillas del río Paraguay. Carmelo Peralta es un pequeño municipio que surgió hace unos dos años como un desprendimiento del distrito de Puerto Casado, en el departamento del Alto Paraguay. Carmelo Peralta vive a la sombra de la ciudad de Puerto Murtinho (Brasil).
Frente a Carmelo Peralta se ubica la Isla Margarita, donde se destaca el edificio de la Prefectura Naval de nuestro país y un montón de casuchas menores donde es posible comprar productos electrónicos. El movimiento de deslizadoras entre estos puntos es incesante; imposible aburrirse mirando cómo van de un lado a otro, en forma continua.
Mejor no hacer una comparación entre Carmelo Peralta y Puerto Murtinho. La segunda es una ciudad, mientras que Carmelo Peralta aún intenta superar los años en que era simplemente una colonia de Puerto Casado, aunque no por ello deja de tener el encanto particular de las localidades que se extienden en la ribera del Alto Paraguay.