Un millón de amigos

"Yo quiero tener un millón de amigos...", dice parte de una conocida canción del brasileño Roberto Carlos. Para la sicóloga, Josefina Reyes, tener tan solo un buen amigo puede resultar ese millón.

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¿Cómo hacemos para escoger a un amigo? La sicóloga clínica Josefina Reyes asegura que desde niños socializar ayuda a aprender conceptos y habilidades, a desarrollar autoestima que con el tiempo se convierte en una estructura de fortaleza para cualquier actividad y para consolidar normas, valores y actitudes de grupo. En los primeros años de la vida, "nuestra conducta es egocéntrica, ya que, en la medida que vamos creciendo, volvemos la mirada hacia el otro u otra y suponemos tener conciencia de lo que siente la otra persona".

Para Reyes, la capacidad de deducir pensamientos, expectativas e intenciones de los demás contribuyen a entender lo que significa ser amigo o amiga cuando somos capaces de ver desde la perspectiva del otro. Y es entonces cuando comenzamos a establecer sentimientos sólidos, cuando surgen los primeros mejores amigos.

"Entre los 10 y 12 años, los amigos se convierten en personas que se ayudan entre sí, y en algunos aparecen conceptos de confianza lealtad, de mutua confianza", dice Reyes. Infelizmente, este esquema no es la generalidad, ya que en otros grupos aparecen signos de competitividad o conflicto. "En ocasiones suele convertirse en un elemento intrínseco dentro de la relación. No son sensaciones o modelos sencillos de manejar. En la amistad están implícitos emociones  y sentimientos", añade la sicóloga clínica.

La lealtad y la confianza van desarrollándose conforme pasa el tiempo, a medida que vamos creciendo, evolucionando. "En la primera etapa, los mejores amigos son los compañeros de juego, alguien que vive cerca o que tiene lindos juguetes, pero luego eso  va transformándose, aparecen los sentimientos de uno y del otro, de la otra", expresa Reyes.

Con el correr del tiempo, un vínculo estrecho con los amigos se vuelve más importante para ayudarnos a sentirnos jóvenes y vitales. "Aquí los dos sexos vuelven a diferenciarse: mientras las mujeres suelen desarrollar más amistades, los hombres en general tienden a retraerse, de acuerdo a las pautas locales —del campo, el pueblo, la ciudad— y a las oportunidades para relacionarse. Otra característica de los hombres es su afinidad con compañeros de trabajo, con los cuales tiene un interés común; esas amistades suelen perderse cuando se cambia de empleo. Pero la regla revela que los amigos se complementan el uno al otro, siendo pocas las relaciones de dominio y sumisión, o de los que quieren ser "modelo" porque disfrutan de "enseñar". "Las amistades que se complementan son las que perduran porque comparen valores, actitudes, expectativas".
La amistad se define como afecto personal puro y desinteresado, compartido con otra persona.
Es muy diversa y dependiente de factores personales, psicológicos, sociales y culturales. También hay grados y variables en la amistad y situaciones que las generan o favorecen a diferentes edades, en lugares de trabajo o según actividades de tipo cultural, deportivo, social o espiritual. Constituye el antídoto para el dilema humano que todos enfrentamos en algún momento de nuestra vida: la soledad.


Utilidad, placer y virtud


Decía un genial pensador de la Antigüedad que existen tres tipos de amistades: de utilidad, de placer y de virtud. La sicóloga Reyes explica que la primera está basada en nuestra propia necesidad e interés. "Son relaciones útiles de las cuales se obtiene algún beneficio. Y, por tanto, funcionan mientras el vínculo que las sostiene se mantenga intacto". El segundo tipo, la amistad por placer, se fundamenta en la cantidad de goce y alegría que se recibe de ella, es decir, los amigos y amigas que únicamente se reúnen para pasarla bien, compartir fiestas y actividades recreativas. El tercer tipo, continúa Reyes, es aquella a la que Aristóteles le daba verdadera connotación: Personas que comparten en las buenas y en las malas, que se quieren y están unidas por un vínculo fuerte de lealtad, honestidad y desinterés. "Esta amistad de virtud, al decir del eminente pensador, es realmente difícil de hallar en la vida, y por ello también sentenciaba: ‘¡Oh, amigos míos, no hay ningún amigo!’".  Y para nuestra entrevistada, ¿cuál es el ingrediente principal que nos lleva a decir: ¡Tengo un amigo!? Para ella, es la libertad. "No existe amistad sin libertad. Somos libres de escoger nuestras amistades". Aunque hombres y mujeres tengan sus propias características para entablar y llevar adelante la amistad, así como para expresar lo que sienten, hay un punto en que todos coinciden. ¿Cuál? En que el beneficio es el mismo: Los amigos y las amigas regalan momentos felices. ¿Qué más uno quiere?

Dirección de Arte: TOOLS, Guillermo Dávalos. Producción: TOOLS,  Paolo Defelippe. Asistencia de Producción: TOOLS, Pablo Bernatto. Modelos: Alba Riquelme, Antonella Marín, para FORD MODELS, y Lucas Valdez, para HYPE. Peinado: Alexis, para Dino Quick Service. Maquillaje: Sabrina Ayala, para Dino Quick Service. Prendas: La Trinidad, Karen Daher, Toqe. Zapatos: Gino Ventori. Agradecimientos: El Café de Acá.

 

FOTOS: ABC Color/Heber Carballo

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