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Cada región de nuestro país se caracteriza por algún tipo de artesanía. Pero ¿cuáles son sus orígenes? Esta pregunta motivó a la historiadora Margarita Miró Ibars a investigar no solo la artesanía carapegüeña, localidad en la que reside actualmente, sino también la de nuestro país. “La artesanía paraguaya tiene tres raíces: indígena chaqueña, guaraní y española. Lo que hoy conocemos como artesanía tradicional paraguaya es la fusión de la guaraní con la española”, comenta.
La autora se refiere a la artesanía paraguaya, utilizada por el pueblo mestizo y que sobrevivió hasta principios del siglo XX, en la obra Artesanía paraguaya de Carapeguá, que presentará el 28 de noviembre, a las 19:00, en la Manzana de la Rivera. El libro es un material con 27 años de registro, recopilación y observación permanente del desarrollo de la artesanía y sus artesanos. “El análisis presentado en esta investigación se pudo realizar especialmente con los aportes de las investigaciones de Branislava Susnik, principalmente, y las publicaciones de Josefina Plá, Ticio Escobar, Osvaldo Salerno, Carlos Mordo, Claudio Malo, entre otros”, detalla.
Miró explica que, si bien el estudio de su obra es la artesanía producida en el distrito de Carapeguá, esta se convierte en una muestra de la artesanía paraguaya por las múltiples técnicas que sobrevivieron y sobreviven en Carapeguá, y que históricamente eran producidas en casi todo el Paraguay. “Varias técnicas desaparecieron por oferta de la industria y el comercio; la aparición de nuevas pautas sociales, económicas, culturales y de uso”, refiere.
Para la autora, el sistema de enseñanza europeizante y la poca oferta de carreras humanísticas lograron que la actual población paraguaya identifique escasamente los rasgos indígenas en la manufactura, cultura, artesanía y el arte paraguayos, como resultado de las escasas políticas de gobierno para proteger y promover los elementos que forman parte del patrimonio cultural paraguayo.
En el Paraguay, las materias primas endémicas de fibra textil fueron el algodón de diversos colores, la hoja de coco yvira y karaguata, principalmente; los españoles incorporaron la lana. En cuanto a la tecnología sobrevive el telar vertical, en el cual se tejen redes, hamacas, tapices, bolsos y mantas; los españoles introdujeron el telar horizontal, que aumentó la diversidad de telas, mantas y ponchos. “Se evidencian las técnicas de origen guaraní, que sobrevivieron hasta principios del siglo XXI; las introducidas por los españoles y las mestizas, que fueron adaptándose o extinguiéndose en función a los nuevos usos culturales, tanto en Carapeguá como en todo el territorio paraguayo”.
La artesanía es clasificada por técnica y tecnología. La técnica incluye el saber hacer; es el cómo, el conocimiento, mientras que la tecnología son los elementos materiales indispensables para desarrollar la técnica. “Por ejemplo, la cestería no utiliza tecnología, solo algunas herramientas”, especifica.
El material consta de dos partes: la primera aporta una serie de definiciones que brindan los fundamentos históricos, etnográficos y culturales para la valoración de la artesanía como parte del patrimonio cultural de un pueblo o una región, y elevar a varios productos a la categoría de arte textil.
El registro presentado también clasifica las artesanías de Carapeguá en extintas, como el ñandutí y la alfarería; las que están en vías de extinción, como la jerga, las de telar horizontal —realizadas con cuatro lisos y cuatro pedales—, la cestería, el tejido con hilos de karaguata, yvira y fibra de coco; y las vigentes, realizadas en telar horizontal con hilos de algodón, lana o trapito. “Como resultado, se identificó que el nombre de tejido es genérico a una serie de productos elaborados con distintas materias primas, técnicas y tecnologías”, puntualiza.
El interés de la autora por este tema nace al observar la diversidad de productos exhibidos en las tiendas de Carapeguá y, en especial, al ver la elaboración de los productos. Resalta que, para este fin, es fundamental el diálogo con los artesanos que comparten generosamente sus conocimientos, transmitidos de generación en generación. “Pero lo que más me impactó fue que usaban el telar vertical para elaborar las jergas, bajera, tapices o hamacas de trama abierta. ¡No podía creer que siguiera viva una técnica tan milenaria en una población totalmente modernizada, o siguieran utilizando hilos de karaguata, yvira o fibra de coco para hamacas u otros menesteres domésticos y, en algunos casos, seguían con los tintes naturales!”.
El paisaje cultural de Carapeguá es único, con sus telares y bastidores en el patio, bajo los árboles o en algún galpón, los hilos teñidos en los patios; las motos que recorren las calles, cargadas de coloridos productos; las casas con sus jardines, huertas o, más allá, chacras, y los animales domésticos que completan el rubro de autosustento. La artesanía es una actividad familiar que da tiempo para todo. “Como síntesis de toda la investigación afirmo que el conocimiento, técnica y tecnología guaraníes siguen vivos en el arte y la cultura paraguaya”, concluye.
Tejido de cestería
Se refiere a la forma abovedada o cilíndrica que va tomando la trama. No usa ningún tipo de tecnología. Al analizar detalladamente los productos elaborados tanto en Carapeguá como en otras partes del país se encuentran las siguientes diferencias:
Ajaka: técnica que aún mantiene el pueblo paraguayo y en Cerro Pinto, Carapeguá, consistente en un cesto resistente entretejido simple o tupido con tiras de takuarembo (Chusquea ramossissima) combinadas con ysypo.
Plano, pantalla o abanico: utilizado además en la elaboración de cestas. Esta técnica queda viva de origen guaraní, formando diseños lineales, triangulares, hexagonales o paralelogramas.
Yry’ague: realizado con hojas pinadas de palma pindo (Cocus romanzoffianum) con entretejido diagonal y triangular. Queda vivo en los adornos que se realizan especialmente para el Domingo de Ramos.
Yrupe: elemento infaltable para cernir las harinas. Hoy sobrevive en las comunidades aborígenes guaraní.
Según la textura
• Suave: los productos con hilo poyvi.
• Áspera: la lana.
• Áspera suave: los tejidos de hilo y los de materia prima de trapo.
• Sobrerrelieve: el tejido-faja.
Tipos de tejidos
Según la clase de tejido y materia prima
Tela: con la técnica de trama y urdimbre realizado en telar horizontal, y con hilos de algodón o lana en telar vertical y horizontal.
Con cuatro liso y cuatro pedales: con el telar horizontal con materia prima de lana o algodón. Se obtienen diseños geométricos, como triángulos, estrellas, rayas, rombos y romboides combinados con colores, y es de doble faz.
Faja: se realiza con telar horizontal, pero en el proceso de la trama se toman cuatro hilos que adquieren una apariencia de sobrerrelieve; el tejido queda firme y no cede al estirarse o con el peso.
Nudo: elaborado en telar vertical. Con la trama se van formando los diseños, cuyo producto son la jerga, tapices, bajeras, bolsos y subproductos.
Trama abierta: utilizado exclusivamente para las hamacas elaboradas con distintas materias primas y fabricadas en telar vertical.
Fotos: Gentileza.